lunes, 11 de mayo de 2009

dominó

eran como una ficha. podían ser noche y día. formar el yin y el yan en uno. la falda pantalón. el silencio en una canción.
pero él dudaba. no lo tuvo nunca claro. o eso dijo.
componer en un idioma y titular en otro. eso eran ellas. perfecto equipo en desconcertante contradicción.

para pescar hay que mojarse. si estudias duro tus manos delatan lo subrayado. cavar implica sudar. para llegar hay que avanzar. y nada es sin trabajo. nada gratuito.

en ocasiones aparecía una de ellas. venía vestida de buena. lo parecía porque lo era.
él actuaba en consecuencia.
cuando era la otra la que llegaba sus ropas eran perversas. sus modos duros. lo parecía porque lo hacía.
y él funcionaba en función.

si te restan kilómetros calza lo cómodo. cuando recibas olvida tus horas. si quieres algo programa un tierra aire.
no te asomes si no vas a dar el salto. no llames si luego quieres callar. no esperes tocar sin acercarte. no verás las nubes si no pisas la calle. o sí, pero no te mojarán.

él quiso saber quién era la que venía. cuál de las dos era la real y cuál la ficticia. y lanzó la pregunta. aún dudo_dijo. pero no obtuvo respuesta. para qué saber si no hubo un antes y nunca habrá un después.
sucedió cuando les vio en la orilla. justo cuando baldovino barani lanzó la fotografía. ocurrió que las vio juntas. de la mano y caminando al tiempo. se acercaban a él directas y sin rodeos. la de largo, negra, sofisticada y oscura. la de buzo pirata, blanca, inocente y clara. buceando los pasos o avanzando sobre las leves olas. la una y la otra.
y descolocó lo que creía. o eso afirmó. pero no. la duda era pura careta. un antifaz para la fiesta. decía desconocer para ordenar sus fichas. para ganar tiempo. para ampliar las vistas.
ellas lo sabían. desde el comienzo de todo. desde que él dijo que podría darse un baño. desde que no se mojó ni un pelo. desde que contó las olas para alargar su tiempo.

las fichas del juego de mesa son suma de blanco y negro. son puntos numerando a cada lado. iguales o diferentes. enlazados por un botón de oro. emparejados. el tres con el uno. el cinco y el cero. el seis junto al seis. _mi preferida cuando niña_

decidieron bañarse y las ropas calaron. el agua ralentizó el paseo. pero ya lo sabían. era parte del reto sumar a sus trapos peso.
el dejó de mirarlas por un rato. desconcertado. a la deriva. dudando para sostener el sueño. que fuera cual fuera _la clara o la oscura_ a él le tentaba. la incertidumbre sin soluciones rentaba.

si lo tienes claro no seas oscuro. voltea _de una vez_ tus fichas.

No hay comentarios: