martes, 29 de septiembre de 2009

verdad

la verdad os hará libres. quedó para los tiempos e igual que voces, interpretaciones. miles.

me sorprendió su nitidez. un padre de familia que no se perdía en tonterías. lo que sentía lo exponía. lo que pensaba no lo escondía. con la carga nula de remordimientos porque lo que hablaba era la vida sin recovecos. un hombre sin pliegues. con los ojos abiertos. y la sinceridad como lema.
su razón era el enredo y el olvido. el colchón de no tenerlos. mentir suponía memoria y un guión aprendido. no estaba para eso. él prefería _sin meterse en líos_ al pan pan y al vino lo que vino.

entre dos miradas puede quebrarse el hilo. te miran distinto. quizá porque ya no te miran. y esa escapada si va callada grita lo oculto y ensucia lo que hubo unido. uno demanda. hay un aflojar de lo conectado por dar sentido. pero el otro calla. y si no se habla hay verdad _que no es mentira_ pero no dicha. y eso estalla y marca con dura metralla.

si te responden de espaldas. si en tu cama sois tres. si levantan un muro en segundos entre tu pecho y el suyo. si el mensaje se atasca. es que está pero amordazada. la verdad existe bajo la almohada. distorsionada y creando fantasmas.

miente el niño igual que el añoso. que no he dicho adulto. tuerce lo cierto el que no ve lo sensato del hecho, el ciego de vida limpia, el peter pan en su cuento.
y cuando unos labios se lanzan al abismo de lo que venga tras la verdad expuesta madura el fruto tantos años verde crudo.

escuece. claro que irrita. estruja el corazón y las tripas. la boca ha de ir al frente y encabezar las tropas que galopan salvando obstáculos cobardes que invitan a engaños, a que calles.
una vez confesada. con su pinchazo agudo se asienta en un costado y logramos dar respiro. poco a poco. las piezas toman forma. las tramas se justifican. los días cobran sentido y lo que hay no se magnifica en sangría.
atrona. claro que pita. estrecha la garganta y flaquea las piernas. azota el orgullo. despierta la ira. sacude cimientos. y te ciega. pero frente a la voz más sincera han de ponerse los oídos valientes. los adultos, los más cuerdos. el escuchar comprensivo y dialogante. y con los ingredientes servidos ya se decide si cenar con velas o en tinieblas dejando que todo se enfríe.

la valía de las verdades de aquel marido con hijos y sin escondite era para el de enfrente. a él no le fortalecía no caer en la trampa engañosa. lo sencillo era lo que movía su motor sincero.
pero quien salta _con esfuerzo y no comodidad_ por encima de lo oculto y muestra el todo _bueno, malo, blando o duro_ es el que crece y suma para todos puntos.
igual que quien escucha abierto lo cierto a pesar del consiguiente temblor. porque la verdad rompe los lastres, suelta cadenas y eleva anclas igual que almas. lo real, lo más limpio nos da la fuerza. a quien la dice y a quien la acepta. nos crece el físico porque lo bueno se agranda y vemos la luz tras las ventanas. tal cual lo saca sarah_hermans. nos comemos el mundo. tras el valor lo cierto. y con esa verdad la libertad mayúscula. la de todos. la única. verdad verdadera.

domingo, 27 de septiembre de 2009

sacrificio

al final llegó a humanizar su maquinaria más fría. se llamaba riu. o eso decía en una de sus solapadas vidas. mataba y cortaba lo pescado. sangre por todos lados. rojo para pintar lo blanco de su reducido cuerpo. tinta regada. aroma de limón para espantarla. y lápidas abrillantadas para compensar su conciencia. pero eso fue al principio y durante mucho. luego ya no.

un corto de animación con muñecos vudú comenzó la triada. el sacrificio del que amó a la débil por pender del gancho más carcelario. un trinchado de mano. por dos veces. luego de la pierna al acerico. y cuando no quedaban milímetros entre el pecho de su amada y el alfiler sanguinario lo vio más que negro con la luz cegadora del último túnel que dicen que se abre.

no sonreía. la muerte invadía cada rincón del cuerpo de riu y de su apartamento. deshabitaba la nevera. anulaba sus noches. y le hizo escoger el empleo donde poder dormir sus pensamientos castigando la humanidad que le restaba. quería silencio. sus lágrimas atronaban sus veladas tumbada en una cama helada. la dirección de sus días era la contraria a la marabunta que se besaba o gritaba.

tras el corto buscaron el último episodio de dos sagas manga. la obligación derramaría sangre de uno de la pareja secreta. se partiría el amor eterno con el acabar de una de las vidas. y ella no pudo robarle el aire a su amado. y él no pudo dejarle a ella el dolor de matarle y quedar con el purgatorio de culpas. la daga atravesó el pecho de la valiente y sacrificada. no lo detuvo su guerrero. conocía lo evitado y el siguiente desenlace.

riu no tenía lazos con humanos. escogió a uno por callado. por generoso al punto de no preguntar nada. nunca. al que respetaba sus secretos. y así las torturas culpables no quemaban restando en lo gélido de su delgado cuerpo de negro impasible. comidas sin habla. cementerios como escenarios de citas. un té abandonado tras una generosa oferta como gancho. ella ya no era ella. era otra. su boca escapó sonrisas. su cuerpo tembló y se calentó en el invierno que siempre vivía y ya no. las circunstancias. eso decía.

él muñeco donó su corazón para que ella siguiera. la princesa ninja acabó con la posibilidad de que se segaran los días de quien tanto quería. el de enfrente lo permitió por no haber salida. y con su menudo cuerpo en brazos acabó con la pareja y el viudo. ya ninguno. si fueron en el eterno pasado volverían a serlo. y ahogó su vida abrazado a su chica en el amor más desinteresado.

no pudo cumplir el trató. riu no era la misma. pero él tampoco y apareció en el mercado para despedirse. al final lo dijeron sin palabras apenas. condenados a quererse en lo imposible del nunca. en quizá en lo venidero pero llegaron tarde. de nuevo las circunstancias. y se besaron con lo almado más que con los labios. el hielo de su cubitera con melena negra terminó de derretirse ante lo confesado en un minuto de entrega. ya no quedaban bajoceros dentro de ella y sus brazos le rodearon confesando que le quería. los dos de pie. con el amor improlongable. con un asesinato frustrado por la vida que insufló a una muerta de noche y día tras día. cómo apuntar al que dijeron digno de irse si le regaló el renacimiento.

valor tuvo el vudú enamorado para lanzarse y pinchar todo su cuerpo hasta lo más mortal.
valor el de oboro sama. valor el de genosuke.
y valor el de unos ojos que en el minuto del amor más sincero entre dos casi desconocidos vio llegar la muerte. la de él o la de ella. y no tuvo dudas. giró en un baile lento. en el último entre ambos. pidió que le llamara. repite mi nombre. repítelo. riu. riu. riu. riu. riu... y la bala señaló con un orificio el gran sacrificio de ella. su vida por la del que le devolvió la sonrisa. su aire por quien debió matar mucho antes y nunca pudo. por amor. sacrificarse.

sábado, 26 de septiembre de 2009

gane

he dormido pocas horas. pero en cuanto mis párpados han comenzado a ser conscientes de la persiana levantada le he dedicado mi primer pensar. anoche tuve una noticia de celebrar y no podía esperar a compartir mi dicha. que es la de muchos.

nos relataban una parábola donde se dejaban a decenas para ir a por una. y de niña imaginaba al grupo a la espera en la neblina del alba sin saber bien qué hacer _perdidas_ mientras él deshacía pasos para dar con la que faltaba sabiendo que dejaba bien al grupo.

unas que no he visto. de ahí que lo ilustre con las de diy_dog_grooming. unas que quise encontrar y más de una vez he dibujado en mis ojos. unas patas miedosas. a la carrera. cansadas. castigadas. ladronas. callejeras. las cuatro, el cuerpo que pasean y muchos humanos _no sé el número bailable de generosos_ me han traído hasta el teclado.

la heroína de todos los animales y de muchos de la zona me detuvo para celebrarlo. me lo dijo el día en que ya lo habíamos comentado _una vez más_ y se cerró el círculo. ya la tenemos. y mis dentros saltaron desde el silencio. quise abrazarla. mi intención era impulso. premiar la buena nueva, el esfuerzo, los meses, las madrugadas, los planes, las cestas sin fruto en las vueltas a casa.

cuatro pezuñas motores veloces perseguidas por mil voces me han despertado esta mañana. la abandonada con nuevo nombre. la que todo el mundo ha visto y mi lupa no rodeó en su busca de paso. la que incluso inventé en otro con dueño de las ganas que yo tenía. la querida por todos los que bombean con sangre animal y más que humana. la acunada en las noches largas desde distancias. la vasca de pelo grisaceo. la que creyeron macho. la desconfiada. y con razón... no atacaré a desalmados. ahora no.

la noticia flotaba entre nosotras. mi contención me ahogaba. y en la prudencia de quien no participó en activo no pude más que alargar mi mano. el resto lo hicieron sus ganas. supo que la fiesta sería también mía. se paró para contarlo a quien se llenaría con lo que sabía. y su alegría infinita le lanzó a mi para fundir nuestros brazos. la hemos salvado. decía su abrazo. ya está sedada. sus labios. todos tranquilos. su pelo mojado.

las almohadillas urbanas no dejan la huella de la arena. rastrear un paseo _huida en este caso_ no se hace mirando al asfalto y sí a todos los rincones detrás de las llamadas sumando pistas. y en esa cacería tensa donde el arma es el bus o un mallazo de la obra se alistaron muchos. extremando sus piernas y olfato. donando sus horas de sueño. cediendo su tiempo y dinero. sin pensar en cansancios. sin sentir que la derrota creciera más que la meta. pastores de urbe en busca del más atemorizado.

ella que pasea cuatro que acogió y le dan vida. ella que alimenta a todo lo que respira. ella que se desayuna con la lucha más activa por ellos. ella y todo un equipo lo han conseguido. tras semanas sin recompensa agotando el verano, en el otoño de sus fuerzas, la perra se ha entregado. abandonó anoche su miedo consecuencia de otro abandono para mecerse en las promesas que calmaran su herida abierta.

un grupo en batida y algunos vecinos deseando su éxito. eso ha sido lo que no se dará más este día. se acabaron las citas marcando el plano. no más comidas cebo ni jaulas fallidas. el dolor de la perdida entre calles terminó con la sonrisa de exploradores y muchos del barrio.

está dormida. una de sus manos no dará más la patita. buscar adoptante será algo más tarde. cuando todo su infierno se calme. cuando lo físico sane y haya que recuperar el psíquico con más que trabajo. cuando el vidrio de las botellas del champán descorchado ya esté para ser reciclado.

felicidades héroes. felicidades pepa.
felicidades gane.
no todo es una pérdida.
todos ganamos.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

cañonazo

lo sabían ellos, recuenco _que les sacó la foto_ y sus adoptados rincones. nadie más fue testigo de aquel cambio. nadie vivió el timón en viro. nadie lo presenció.

junto al mar un salvavidas. donde hay agua un flotador. para evitar la invasión del líquido acortando la vida la medicina del flote. para no hundirse en las mareas revueltas un psicólogo relleno de aire manteniendo el cuerpo del que agita los brazos entre lo seco y mojado.

poco importa quién prendió la mecha. hubo una chispa en su imaginario y supo que lo haría. empezaba su huida.
para cuando llegó ella ya estaba el escenario. lo oscuro. la munición. la cara escondida. y los fantasmas. con todo el dolor que inventan.

un cuerpo en azote no ayuda al socorrista. más le valdría la calma pero el pavor se moviliza y no deja músculo sin vida. el problema se hace grande, mucho más grave, y la costa se aleja y nadie la acerca.

dónde encontrar cobijo cuando se busca agredirse. cómo dar con regazo si enredamos los lazos.
cada uno tiene su acantilado o su anillo cianuro. cada quién sabe de su soga perlada o sus colores en mil pastillas. de manera irreal _ficticia_ pero dañina. sin sangre pero con heridas.
él escogió lo de siempre. una vez más la lanzadera que le mandara fuera. de golpe. dramatizando. con un estruendo que ensordeciera la vida que iba a su lado. hecho una bola. en remolino. y sin oídos.
esta vez estaba ella y ya no era tan idéntica escena. la vista trabajada de su pasado no le dejaría ser bala. ni contra otros _mucho o poco_ ni contra él mismo. fuera del tubo. a airear la cabeza. donde respirar luz y verdad.

el tablón que no lo es tanto ha de evitar sumergirse porque alguien le ordenó ser salvador. nadó todos los estilos con tal de obviar tantos kilos. que lo pesado aumentaba con los minutos. que sentía más cerca el fondo y no se podía. había que seguir arriba. tenacidad. paz. claridad. y calma. y con la suma de todo ello el amor se hace balsa y rescata al gran tonelaje de beber de más.

la cobardía atascó su cuerpo dentro de la gran arma. no atendía a propuestas. su fiera ciega decía que todo se repetía. la misma historia. y él achicado para entrar en la garganta del cañón oscuro. más menudo. reducido frente a todos los que inventaba fuera de su escondite cobarde.
ella con su blanca palabra hecha vestido. ella con su amor hecho ganas. ella con su empeño hecho mano se ordenó salvaheridas. bola a bola limpió el campo de batalla. sacó fuerzas de flaqueza e hizo mayor el diámetro del cocodrilo negro que tragaba al sufrido. para sacarle. para que aceptara la marcha atrás. para que viera otra posibilidad. más caminos. las bombillas prendidas. las del amor sincero. las de la caprichosa vida y sus líneas torcidas. la de esa aceptación. y la sonrisa. con la mirada bañada. pero la sonrisa.

el médico no es máquina. ni la enfermera férrica. la colchoneta se desinfla. igual que no nada eterno la ramita. el paciente ha de colaborar. el sostenido a flote no debe saltar. que la ayuda in extremis puede extenderse lo que haga falta pero cansa. y los hombros bajan igual que la voz y el arrastrado paso. quien ayuda necesita pilas porque no basta con su motor.

salió. se giró y la vio de largo. una princesa con la certeza hecha prenda. con la mano extendida para achicar el cañón y el agua. con la solución que hasta entonces no quería. no escuchaba. no veía. sin aspavientos, relajado, controlando la respiración le confió el nado. se hizo valiente. inteligente. y ya está a salvo.

martes, 22 de septiembre de 2009

gerbera

esto ya no es lo que era. y menos mal.

los cordones de unas zapatillas _las del pie izquierdo_ estaban enfadadas. vaya si se notaba. por más que las lazaba ellas se desunían sabiendo el riesgo de ser pisadas. no se aguantaban. la acera llovida las hacía más suicidas, pero ellas seguían. no te aguanto. suéltame el brazo. y de poco el trastazo por el otro zapato.

abrían puertas para dejar pasar a las faldas. la de la entrada enmarcando su espalda. la del pasaje uniformando su traje. y ellas _reducidas en volandas_ aceptaban.

conocí una noche a un extranjero afincado en españa. el alemán desde su alto me contó de sus medallas. y todo porque jugamos a que yo le otorgaba una por una canción acertada. la emoción del baile. supongo. ya se sabe. con música casi todo vale.
desde aquella noche guardo la condecoración de oro que me dio en modo placa. compartió su secreto con una extraña. lo que le fue revelado por boca de un premio nobel. eso dijo. nunca lo comprobé.

desnudaban su invierno para cubrir los cuerpos presumidos luciendo tirantes. unas mangas de camisa extendidas en plena lluvia o helada para elevar a las que taconeaban. y ellas tan encantadas.

en las películas dicen del bucle grande y el menudo hasta hacer el nudo. riman a dos barrigones para apretar bien los cordones. y una vez que el niño lo aprende lo practica infinitas veces. sin pensar. de modo automático. un robot que sostiene el pan y el periódico con la barbilla mientras los ata. tantas veces como a las cintas les de la gana. ad infinitum.

entraban las caderas y todos se miraban. recuento de hombres y de sillas. se levantaban y las invitaban. tomen asiento. muchas gracias. decían bien ajustadas.

dos nudos mejor que uno. el par que asegura un poco más. no siempre. que si el cordón es satinado y con fibra plástica es menos amigo de su aliado. y forman a la mínima un lío.

pues bien. los tiempos son lo que son. para bien y para mal. la mujer y el hombre tal cual. está bien, no siempre, está mal...
confieso fruncirme si no apuntan ligeramente el gesto de la cesión del paso o del abrazo de su chaqueta. algunas veces lo hago. según con quién y cómo. pero como balanza he de decir que soy de las que no ve en los ramos sexos. ni en tantos gestos. yo soy de las que se lanzan.
pensé en mi _entonces_ chico aquel mes de abril y escogí la gerbera. naranja. una de las de design_is_mine. para su sorpresa. su sonrisa. y su agradecido cambio de roles.

y ahora me guardo la generosa medalla del germano largo para darla entre flores cuando busque ofrecer un regalo. que tiene que ver con los lazos de los zapatos. no tan secreto si lo dijo el nobel. advierto. ahí os asomo el principio del ramo.
que el que quiera saber lo busque. que dará con ello. y el resto _damiselas a la espera de puertas abiertas_ lucid salones que no os ato yo los cordones.

lunes, 21 de septiembre de 2009

gamusino

las idean para adultos porque somos _y son_ niños. las hacen las mentes de una generación que merendaba dibujos en la tele _me dijeron anoche_ y lo dirigen a su misma quinta. para volver a los calcetines cortos y al de punta con nocilla de dos colores.

el amor es el motor. y el enamorado es todo un explorador.

si bien no soy aficionada al cine de masas, las de ficción, violencia y animación _también_ me dejan en casa sin gran pantalla.
me propusieron ver una de las últimas y sin pensarlo acepté la tarde.

un niño con gafas queda prendado de la niña sin dientes. un globo por la ventana. la linterna. y una promesa eterna. con el corazón.

sabía que habría penas. pero esperaba la recompensa. tras un corto entre nubes me hice catarata sin aliento. la sencillez casando lo intenso provocó en mi el escape de lo que se estaba yendo. lágrimas por un amor animado destinado a enviudarse mojaban las otras por ver una puerta cerrarse.

cuando el helio de tu ilusión henchida es el amor en esencia no hay quien desinfle el globo y desciendas. si ellie no podía ir a sudamérica él le llevaría. y en el centro más amado de su cuento pintado el niño abuelo alzó el vuelo tocando _de nuevo_ el cielo. allá vamos. le dijo a la desdentada del marco.

el humor nos salva. el sentido más reído. el mirar lo torcido y esbozar sonrisas. el humor que es el amor en juego. ese nos seca los salados mares de los ojos o chapotea en sus charcos para hacer las riadas más bellas.
tuve de esto. reí entre lloros. sonreí de continuo. liberé carcajadas a pesar de mi cara mojada.

poco traban las circunstancias cuando sobran las ganas. no hay muros tan altos que lo apasionado no salte. desaparecen las toneladas, las zapatas, las corrientes adversas y las millas sin fin. si hay ilusión no hay vejez ni achaques. habiendo certeza la selva es senda. el hambre, las noches, el frío y las fieras no acechan al que apunta su misión en la brújula. se hizo una promesa. completaría su álbum soñado y daría sitio a su casa en las cataratas.

su remolino celaba. habló lo que nunca supo. se aferró a su falda. corría en desespero ciego tras la marcha. y las palabras paño fueron película mientras callaba.

lo infinito de su amor era una jaula. su empeñada entrega provocó más ceguera. no veía más que retratos y su casa con alas. no vio al niño. no vio al perro ni al gamusino. estaba preso en su amor explorado, en sus recuerdos. y no veía más allá de sus pastas cuadradas.

viví en la piel mezclando ficción con vida. un aroma para esa tarde. un abuelo para darme forma a lo pensado. miles de globos con sus colores despertando del nublado llanto. las manos calmas susurrando. el tiempo en cuna. la sala a oscuras para encender lo que sí valía. lo proyectado. lo prometido. lo que está dentro y nadie lo quita.

tras tanta ruta, peligros y esfuerzos cumplió. pero al sentarse satisfecho de lo hecho por prometido ella le habló en su escrito. gracias por la aventura, ahora te toca. y el anciano destapó su mirada. comprendió. nació de nuevo. salió de su cárcel y vio al niño, al perro y a _kevin_ la gamunsino. vio mil caminos. vio que la casa era casa y pesaba en su andanza. vio más puertas y aire. vio sus cristales limpios de dioptrías. y vio que en su nueva aventura de explorador intrépido había un sitio también para ella y sin cadenas.

amor del puro. amor esencia. miles de globos llevándote donde quieras.
de ahí mi dicha. de ahí mis lágrimas. de ahí mi película animada con cinco personajes para ser uno y un aroma para bañar a todos y no borrarse más nunca. gracias.
amor del cierto. amor profundo. prometido _sin decirlo_ de corazón.
y que haya quien no lo vea como no ven muchos _o no creen que exista_ al gamusino... eso sí es pena!

domingo, 20 de septiembre de 2009

huecos

saqué la foto de entre_pucheros. vi el par y tuve que cogerlos. en blanco y negro. a la espera. para servir. tan frágiles y valientes al tiempo. dos huevos.

consumimos mucho. demasiado. llenamos la despensa hasta arriba con temor a la ausencia. completamos los estantes del frigo. lo rellenamos entero desusando _algunos_ la bandeja troquelada que colocaron _se preguntan para qué_ en la puerta justo debajo de los quesos para el gratinado.

la expresión de queja queriendo decir sólo_faltaba los lleva como ingrediente. se le añaden a lo que extremoduro cantaba de lo que hace falta para_estar_tan_colgado...
hace falta tener cara. hay que echarle valor. y para ello basta con el par y no con la docena ni la media.

consumimos tanto que ahorcamos las perchas. hacemos del ropero un metro japonés en hora punta. sumamos a lo excesivo. ponemos más sobre lo sobrante. añadimos escogidos a la colección de abrigos. más calcetines que pies tiene el año. muchos más vestidos que calor hace en verano. más. siempre más. y aún seguimos abriendo sitio.

empezó a sentir que faltaba uno. no quiso destapar la caja. y a través del cartón no lo vería así que jugó al suicidio del imaginar la ausencia. el fantasma ocupó la huevera.

consumimos gente. conocidos. colegas. y algunos _con dos yemas_ resultan amigos.
conocemos y la agenda del móvil se alarga. contactamos con nuevos y el número de facebook _estúpidamente_la mayoría de las veces_ crece. estrechamos nuevas manos que reciben nuestra dirección de correo electrónico y hacemos lo propio. son más para nuestra lista. son más. tenemos más que ayer. y menos que mañana. probablemente.

pasó la noche en vela. una más. su cama se heló más que la tortura que guardaba en la nevera. no tuvo valor para abrir la puerta. para comprobar su miedo las horas de la madrugada se hacían eternas. no lo lograba. se retorcía pensando en el huevo de menos.

consumimos en múltiplos de seis. decía monk que lo lógico serían hacerlo por decenas. la unidad más lógica. pero es lo que nos sirven y así compramos.
en caja de plástico o en la acartonada descansan con la fecha de salida. y llegan a casa con la carne, la fruta, las conservas, el pescado y las hortalizas. consumibles que comeremos y no serán más. y repondremos.
si quiero un calabacín lo troceo y me libro de los restos. lo que no cocino del pollo va al basurero. y la lata de sardinas _una vez vacía_ la coloco en reciclaje. pero algo me ocurre con los huevos. debe ser que no los tengo... si conservo la caja con ellos dentro sufro ver cómo van desapareciendo. no me ocurre cuando están sueltos en la balda fría de la puerta blanca. allí apilados son como una de las manzanas que pelo, como uno de los frascos de mermelada que acabo. y no pasa nada. pero si no los saco de la caja nada más llegar a casa luego me escuece su falta. su asiento me grita que falta uno. y se me estrecha _un poco_ la garganta.

con el día entendió que era mejor saberlo. se armó de ellos e hizo recuento. no sumaban la media docena. había uno de menos y él no había cocinado nada.

están las cajas de seis y de doce. pero las hay también de diez y de treinta. muchas gallinas.
mi compra es de soltera y escojo lo razonable para que no caduque.
pero la huevera donde coloco a mis seres no es del tamaño del que era. cada año, con el tiempo, va creciendo. y si hubo cáscara con relleno querido no dejo que nadie _ni ellos mismos_ los desparezcan.

expuso con los que reunió su pálpito. se hizo pequeño.
yo hablé de otra manera pero de mi huevera. de los que guardo dentro. de los que entran en mi nevera y no tiro aunque den uso. conté de mis crecientes celdas. que poco a poco subió el número y no me revientan. dije de su casilla. le situé en columna y fila. y desarrollé la razón de su espacio. de su no marcha. de su imposible ausencia. aunque más huevos llegaran. aunque mi gente aumentara. a pesar de ser más los que llevara. aun queriendo romper su cáscara él mismo. aun decidiendo un día escalfado y otro duro. no desaparecería. no de mi corazón con huevos _que ahí sí los tengo_ donde no entran huecos.

viernes, 18 de septiembre de 2009

grabados

los cambios radicales graban a fuego leves detalles que se hacen huesos en tu cuerpo. lo rescatado con el hundimiento, lo que nos cupo en las manos. lo que entró por los ojos hasta que se acabó el tiempo.

nos pidieron silencio. la prudencia era vital. no podían notar nada. lo sabrían después. una vez resuelta la hazaña. mudos hasta el último momento. y cumplimos el reglamento.

el grabado es más surco cuanto menos conscientes seamos. si advertimos la marcha de algún modo preparamos el linóleo. y lo profundo no es tanto cuando hay alarma. cuando desaparece ese alguien o perdemos de vista un rincón el punzón araña hondo, entra más tinta y es más lo que pinta.

nuestro último día fue una excursión. mi secreto hervía y al atardecer me detuve. cómo contener una olla a punto del brote si se tienen once años? con la promesa. todos jugaban y mi quietud pataleaba. las preguntas que me hacían se sentaban conmigo sin retornar a su lado. qué decir si no podía. hice por retener _como en la imagen de emily hunt_ sus carreras en corro y las risas. imaginé el septiembre de vuelta. no hallé respuestas. mi silencio _aun con satisfecho cumplimiento_ lloraba.

el decir adiós mueve las fotos. cuando no hay despedida corremos a que revelen el rollo _quizá inventado_ y las imágenes son más claras. y ahí las guardamos durante años. las repasamos en nuestro álbum de lo pasado. su definición compensando la brusca huida o separación. una instantánea para aquella escalera antes de las meriendas. otra para el libro de sociales con un bicho aplastado. y no varían. las rescatamos cada vez que la mente vuela a buscar lo que hubo con aquel niño o en casa de tu abuela.

fue el recreo _en el monte_ más amargo. para todos el pistoletazo del descanso de clases. para mi el cañonazo a otra fase.

miras la foto enmarcada _real_ y giras hasta sus nuevas caras. los mismos pero con más años. igual ocurre con las que llevas guardadas y para ti sacas. en ese álbum hecho entre tus neuronas siguen siendo las mismas personas.

terminó el verano. se confirmó nuestro plan callado. yo no acudiría a clase. mi silla vacía. y una voz seca preguntó dónde estaba su amiga.

según mi teoría en mi memoria la imagen de aquello sería borrosa. no nítida. y por esta misma regla yo debería ser fuerte grabado en la mente de alguien.
porque yo _a medias_ me despedí, en silencio, observando, y de modo absurdo. tuve ocasión. pero mi marcha imprevista no dejó espacio a su adiós. el niño está _siempre estuvo_ pero a retazos. no exacto. no muy claro.
cómo estaré en sus fotos yo?

miércoles, 16 de septiembre de 2009

estrenos

lo que nos inculcan y lo que asumimos tras los días es lo que escuchamos y analizamos cuando nos hablan.

él era más de la vida que de su falta. como todos. supongo. de tontos... si no cómo! de haber podido _de conservar conocidos en planta_ tendrían una colección de ecos. con su libro guía no bastaba. querían abarcar la dicha que les latía y crecía y seguía.

me educaron en después de todo un cielo. y mi inconformista niña se hizo periodista y trabajó el campo. denominador común era el llanto. ante la marcha sorpresa y frente al anunciado robo. eso era el después. cuando el negro teñía de noche las horas haciéndolas siglos. cuando el silencio se salpicaba de suspiros y arrancados gritos. pero para el previo había más versiones y en varios colores. no siempre virando a luto.

fue el primero en escuchar mi teoría. tan evidente que no se mostraba. tan sólo la cara. y el envés del revés. pero él vio cómo le daba la vuelta y junto al cambio me fijaba yo en la despedida. él que a punto estaba de celebrar novedades. él que brindaba por cada segundo del crecimiento en aumento. el nuevo estado. la nueva forma. los gestos nacientes. imaginando lo que vendría por desempacar y ser primera_vez_que todo.

nos cuentan que cuando no bombea nos llega la muerte. hablan del duelo. y miran lejos buscando consuelo. es una muerte. yo la he rozado. fue pesadilla décadas atrás. fue amor en jarro frío más tarde. y luego canción y besos con un abrigo. la he conocido. estuvo a mi lado en distintas plantas, diferentes camas, manos y manos, chotis cantados en tarareo y bailes, oxígeno y desaliento. le perdí miedo. estuvo a mi lado.

los niños varían por días. dijimos. una semana y será otro. pasados meses verán al nuevo. cada hora, cada moverse un comienzo. la vida en continuo empiece. todo virgen. tanto por explorar que la sorpresa no ve más allá de la fiesta. pero... es que hay más?

dicen que la muerte es la que corta los días y se lleva a los nuestros. la que deja las frases a medias, los besos no dados y mil pensamientos no resueltos. la cama vacía. el traje sin relleno. el libro empezado. la visita más que pendiente. la inútil espera. la siega.
yo digo que de esa muerte hay mucho entrelineado. mucho no dicho que no es guadaña ni cementerio. pero es mi cuento. que no me lo dijeron.
y digo también que hay otra muerte. la oculta entre la vida. dentro de los días y sus estrenos. muerte pequeña con alfileres y muerte gigante con renaceres.

los bebés con su primer paso reciben aplausos. y nadie se percata del ir del gateo. con sus palabras claras el niño mata al balbuceo y esto es invisible ante el jaleo. los ruedines de como_la_pizza_taco taparán al triciclo igual que el paso a la ducha ahogará al patito amarillo. el pocoyo al sonajero. las sábanas al saco. el cómic al cuento. y la vergüenza al abrazo. sin miramientos.

se queman etapas para seguir. se acaba con algo para empezar con más. y con la ceguera de tanto papel de regalo en mañana de reyes no se ve más al peluche del pasado año. no dan los ojos.

la muerte en vida. la pequeña y la infinita, las dos, también existen mientras palpitas. lo sé bien. de buena tinta. y no pasa más que un renacer y seguir con vida. quizá con otra. pero con vida.
la mínima muerte se multiplica y apenas cala. es como la lluvia más fina. como la humedad no visible. las mariposas ya tranquilas en el estómago. el olor a nuevo evaporado. el misterio resuelto. el dobladillo alargado. el número no más marcado. y un olvido olvidado. leves pinchazos y los nuevos pasos.
la muerte magna, mientras respiras, si llega arrasa. sin esquela ni séquito convierte lo vivo en quieto. es como la más encendida lava o el peor tifón. la daga afilada guillotinando de lado a lado. el infarto de la luz del día. la anorexia de los colores. el siniestro más absoluto. lo extremo. tú en reversible cuerpo. sin venas ni huesos. sin aire. pero en estreno.

y es que es eso. con la muerte grande no vemos el paso que está claro en la chica. con la catástrofe no entendemos el cambio, el comienzo, lo recién llegado.
tal vez sea eso. empezar _tras todas_ de cero. tras la menuda. de la pasión a la danza madura. tras la mayor. con el asesinato entre actos. y tras la irreversible eterna. tras la temida. tras la más negra.
van de la mano. muerte y estreno. fin y comienzo. así es la vida.

martes, 15 de septiembre de 2009

compensaciones

dice que soy hacha que una vez clavada se hace puerta blindada. el imposible acceso a una gélida espalda. una sordera para palabrerías. las mayúsculas más grandes. subrayadas y en negrita. un no rotundo. los suspensivos de chema_madoz bien gritados y ya quemados...

está la acera duchada. empapada. calada. y está el deseo de quien todo lo da a cambio de nada. así que si el desayuno especial del año sale de aquel horno guardará la eterna hilera bajo las regaderas. por ella lo que quiera. blanco.

dice que soy arena. granos en molde acoplando sus formas. hoy pie chico y luego grande. ahora rodillas, después cadera. arena que acoge. arena que abraza. arena que aguanta el agua tras agua. arena que traga. que escupe y otra vez bebe. arena que regala al sol y se seca y parece que muere. arena que espera el beso de la ola y cuando llega se ahoga. arena que es fondo. arena que es masa. arena de nuevo en tabula_rasa.

escogió liebre y guisaron gato entre fríos tratos. para la queja no hubo orejas. allí no regresa. negro.

suena excesivo el corte cuando uno se hace leñador para partir peras. se hace montaña la arena que muestra paciente su millón de mejillas. tan extremista el carpetazo como la playa desierta. un telón caído y una duna. la tapiada puerta sin manilla, sin mirilla. y el cubo con asa lleno de playa sin mar cercano. un lado y otro. sin titubeo. y en el centro la virtud.

como su mano hecha cuchara. así veía que su amor se le iba. la hundía de nuevo y del lavabo surgía otro intento. era asir contra el viento lo que se le escurría. pero ella seguía con tenaz concavidad. ella quería. algo vería. más blanco.

negro de la ausencia. blanca es la suma. y entre ambos colores mil pantoneras de oportunidades. un sí con un no. un no con tal vez. un puede ser junto al no seguro. un quizá tras el sí preciso. un todo puede suceder. veremos a ver.

sin moverse del sitio, sin viajar ninguno, entre ambos groenlandia se hizo cubito. tengo cerillas, nos acercamos? propuso el deshielo uno. me asusta la llama. expuso el congelado segundo. y murieron helados. lo más negro.

cuando las variables gritan que hay gato sin oídos y hay un iceberg sin encendidos no queda mucho que hacer. la poca tela que cortar incita a la muerte presta. de un hachazo. poco que pensar. ya desgastados. todo muy claro.

ser gris sería lo suyo. pronunciar un no en negro seguro parece fácil. insistir en el paciente y sufrido blanco no es tan sencillo. cualquiera de los dos platillos del equilibrio es complicado de quedar sin baile. no siempre se corta por lo oscuro. no siempre se queda uno en claro. lo que ofertan por nuestra decisión nos determina. las circunstancias una vez más son decisivas. el entorno nos balancea. los pros y contras en paralelo y a ver quién gana.

si propongo un zurcido y me retiran la prenda que se queden con el siete y yo con mi filo. ahí soy tajante. eso dice y lo asumo.
que para otros guardo y sin que no se mojen _a pesar de las tormentas_ muchas cerillas. y a veces en vano. y eso dice también. y lo sumo.
si soy hacha o arena depende de lo que se me ofrezca de vuelta. el aguante o el acabose lo deciden las compensaciones.

lunes, 14 de septiembre de 2009

contorsionista

probó no de todo. pero casi. probó mucho. le dolía cada milímetro de sus adoptadas posturas. demasiado tiempo en forzados gestos. y los lamentos comenzaban a ensordecer lo externo. ruido. dolor.

trayecto en taxi lo mismo que dos mojitos.

una noche logró uno de sus no va más. lo que no hacía en pista. lo que el público no había visto. retorció su cuerpo _como lo vio jan_durina_ hasta un dolor placentero. se empeñó en caber en su dentro y la caja abrió su tapa. allí, como en ensayo, con la barbilla hecha ombligo y la nuca en los tobillos tocó fondo. pero aún no lo sabía.

un aperitivo entre niños de porcelana que acabó en improvisada sobremesa con dos enanos desatados.

la soga hecha agua tapaba lo que cantaba. su juego del encaje en lo pequeño contracturó sus restos. le curarían lejos. o eso creyó. y se marchó dejando al circo sin su número. tras los elefantes nada. antes de los payasos vacío. y en su camerino mil mensajes no respondidos y la caja.

una moto con un solo casco se hizo coche con embrague roto.

regresó cuando el público aplaudía. no encontró la caja donde esperaba. pero dio con ella y habló de su marcha, de su cura y de su no ya _ja_ locura. y la caja _descerebrada_ confió en su función y en el género humano. no juzgó nada y abrió _una vez más_ su tapa. vacía, hueca, presta. a la espera, al abrazo, a la gesta.

un cava cual zumo helado previo al moët amargo.

dispuso su intención. se plegaría para estar con ella. la tapa rio. en silencio. sabía que no se daría. propuso doblar su retorcido para amoldarse a lo que quería de su presencia. hacer de una vez el número que le rondaba ya años. algo imposible. se harían todos niños. abrirían las bocas y el ohh desbordaría los vomitorios. entrar despacio y salir sin prisa. en eso consistía. y allí dentro _con forma de cubo_ los vítores les mecerían.

una promesa vía sms coja de hechos provocó risa y sentencias entre mutismos.

llegó el momento. les anunciaron por megafonía. trasladaron la caja al centro. el cañón iluminó su presencia y anocheció a la audiencia. el redoble alimentó el misterio. tiempo. nadie entró. y en la arena la caja a lo suyo. contó ojos, voló columpiada en lo alto, paladeó los brillos luciérnaga entre el público...

cuatro horas y media en dos asientos repartida para amanecer con migraña.

el bigote con tripa lo dijo: _lamentamos la espera. nuestros trapecistas saldrán a escena. un aplauso, por favor_ y la caja en volandas sacudiendo su tapa fue devuelta al camerino. no pronunció palabra.

los primeros pasos de una sobrina antes de cerrar la noche bailando en un ático con terraza.

huyó. escapó como hacía. dejó el show sin lo acordado. ni lo intentó siquiera. se hizo avestruz. se hizo gallina. se deshizo para la caja.

tres días enmarcando dos noches dieron de sí lo que cada uno quiso.
las cajas dejaron de serlo igual que los contorsionistas.

jueves, 10 de septiembre de 2009

manada

anoche me dijeron que no se debe abandonar la manada. lo que yo digo. se ha de acudir. sin un pero. es la razón del equipo. responder a la llamada.

los animales perciben el miedo. un perro te huele los nervios de lejos. y así los niños que aún no terminados se fían de los instintos. los niños, libres de mácula adulta, activan los básicos sensores y llegan a oler también tu temor. sin error. como animales.

hemos ido al médico. lo anómalo duraba tiempo y han estudiado su cuerpo.
éramos varios. mi padre. su preocupación. la enfermera. su atención. pompa. todos sus granos. el veterinario. su tino. el gato _juli_ de secretario dormido. mi calma. y yo.

que no vea tu alarma cuando se caiga en derrape. que no sepa que ríes cuando cree que te engaña. y réstale hierro a la sangre. evita llevarle a tu campo y riega bien su árbol. no desnudes sus ojos a tus desvelos. asegura bien el nudo de la venda para que te tenga por héroe. su reina o caballero. según toque. su ecuación resuelta. su extravío encontrado. su placebo. y que siga ciego.

le duele a mi padre cada pinchazo a pompa. cada exploración o raspado. aúlla por ella y le extraña mi paz en abrazo. sin suspiros. sin tensión. sin dolor añadido.
no sabemos el umbral doloroso de la perra. ofrece quietud ante lo que debiera hacerle enloquecer. enmudece el jadeo bulldog francés. se hace armadura. se crece. la más valiente. sin una queja. sin la demanda. sin un porqué.
a mí me duele la x. el no saber me mata. el qué tendrá. no asir la respuesta. mis manos huecas. eso me acaba. pero ante su dolor y miedo soy _el más anestesiado_ napoleón.

te necesitan. lo dice el mensaje. tu móvil vibra. lo dejas todo. vas a la tienda. pides sin talla. no hay mucho tiempo. de azul y con botas acopias aire de camino. aire para tu misionera fuerza. aire para sus heridas. y para el globo de sky_parrot. que lo hinchas. cubres tu cabeza para la distracción festiva y llegas. no está sola. camina junta la manada. quién dijo miedo?

martes, 8 de septiembre de 2009

ojos

esa vez no quería abandono en mitad del paseo. no. no podría con otra escapada y se lo pidió a quien abrazaba. quédate conmigo por esta vez. no te dejes el cuerpo en mi lecho. mírame.

la ira más viva se hace dragón tras los párpados.
la compasión apila mantas en lo negro de la pupila.
el amor se hace una vida desde el fondo de la retina.
el tedio. el rencor. la alegría. el rubor. la agonía. la ida.

con su imaginaria reflex capturó ya varios. todos impares. sin su otro. ojos sueltos en su momento. en el instante donde la verdad sale. sin disfraz ni camuflaje de frases. un ojo desnudo para su foco. su mirada encuadrando lo que el resto ocultaba. el espejado alma en uno del par. un click y restaría a su vera. eran secuencias haciendo su historia. lo cierto de cada mirar secuestrado con su cámara.

los ojos son bocas. son pozos. son el lenguaje más valiente, el imprudente. son lo atado en mordaza campando a sus anchas. son el destape, el desarme, la revelación.
los ojos son libros. son bibliotecas. son el niño que no miente. el ebrio que desmiente al que habla. son la torre de babel en uno. el traductor simultáneo.

se quedó. entendió y estuvo. y vio como lloraba en emoción plumada.

los ojos reciben pero también dan. por ellos vemos y a la vez nos ven a pesar de escondernos. los ojos sirven, ofrecen, regalan, no callan.
son mucho más de la indiscreta de hitchcock. más que un stewart buscando asesino. son la trama y acción de aquella estancia. el otro lado. la cara interna del ventanal. dentro de casa.
los ojos son lo que les sucede a quienes controlan con la luz dormida. lo que ellos viven creyendo que nadie sabe nada. no de su vida.
los ojos cuentan si lloraba gracia en su sala. si lucía bata o salto de cama. si era ángel o se enfadaba. si era princesa o la reina que parecía.
son más. lo son los ojos. mucho más que la mirada de james lista para observar a través de la máquina. son el par invisible que vigila en silencio y se nos cuela dentro. como en la imagen de kalle_gustafsson. cinco los ojos. intensos del hombre. inquietantes. objetivo el de la cámara. frío. y presentes sin excepción _y en plano callado_ los encargados de recibir la verdad no siempre entregada.

se inundó su mirada y no pudo retratar nada. aquella sorpresa hecha baño confesó su más hondo. lo incontrolado. y en lugar de robar para su recuerdo se abandonó a su alma encuerada. esa mañana fueron sus ojos los que hablaron.

lunes, 7 de septiembre de 2009

ombligo

ignoraba su error. o tal vez no tanto. sentía _y ultimamente mucho_ que algo no marchaba bien pero no ordenaba las invasiones de mal y negrura.

dicen que se ha de matar_al_padre para dejar de sentirnos mirados en examen y crecer más libres. suena dura la imagen de encontrar nuestro camino.
dicen _también_ que algo invisible une a la madre con el hijo. un umbilical de por vida. que no se ve. y quizá sientan más ellas. las que nos llevan. las que paren.

en pleno centro del cuerpo y casi olvidado. perforado por un metal que no recordaba cuando respondía que no lucía piercing alguno. en algún momento dejó de ser accesorio y pasó a ser ella. como una ceja. como un tobillo. como en la foto de odeo_punto_com. así, su perforado ombligo.

escuchaba atronadoras voces entremezcladas gritándole tan bajo como repetido. en plena noche. hora tras hora sin conciliar sueño por vivir la guerra en sus adentros. y noche a noche, con cada reproche _que de día escondía entre los bultos_ a sí mismo, un bordado más en la funda de la almohada. un inventario creciente muy a su pesar. un listado que desvelaba sus madrugadas y le robaba el respirar. volteando la funda engañaba a su instante. la tela más fría. pero en la batalla más sangre.

el ombligo es un remate. y en contra de los que afirman que sólo acumula pelusa hay quien le otorga su lugar y función. un punto para la equivocación. el put_off.

temía a la luna como al autoexamen. cuando la luz se iba la araña tejía sobre su cama. y lo esquivado de día asaltaba su cuerpo. aplastaba. sin salida.
las ideas en rueda. sin vista _por un sin valor_ para respuestas. sus miedos en soga. y su sopa de amargas letras en remolino. vueltas y vueltas. como el tifón. el dedo en círculos. el estómago revuelto. y de nuevo con el ombligo. la mula al trigo.
sin superar lo paterno. sin aflojar lo maternal. haciendo del no_pasa_nada un himno. tapándose la cara cual niño. no estoy. ya no escucho. me he ido.

gran parte del adulto es cimar la independencia de nuestros padres. la horfandad del ya_lo_resolverá_alguien. el destierro del relajarse. las herramientas con las que trabajar y trabajarse.
no hacerse cuna. no ser ovillo. ni plañir fetal en cuatro.
esforzarse. escalar del hondo. buscar el fósforo.
no centrarse en un camino. rechazar las orejeras del burro. no achicarse.
comprender que tus pasos son tuyos y van junto a otros. que tus actos darán cosecha. a ti y al otro. y que la meta está para quien corre y se reta.

antes del habla descubre su cuerpo el bebé. las manos y los pies. los dedos. reconoce los ojos, nariz y boca. sabe situar la cabeza y lo que sienta. encuentra luego el nudo. lo estudia. y no ve más al curvar su espalda. él es su libro. su nuevo cuento a trillar. y en sus minutos no hay más estímulos. no caben. no hay más que lo suyo. vive el aprendiz autismo del niño.

con décadas espaldadas debió cortar el hilo. debió acabar con la cadena a su centro. la que impide crecer y andar maduro.
sin hacer más que quejarse. sin extirparse al padre. llorando sin cesar a la madre. así no hay noche en reposo. no hay paz de conciencia. no hay silencio. no hay avance. no hay olvido del metal entripado como la que superó lo suyo y hoy luce el remate sin más, sin torturarse.
no hay más caminos. sólo barrotes y mucho egoísmo. y el foco y vórtice de su palpar en lo oscuro. centrado en el botón al que adjudicó un rol destructivo. carajo de ombligos...

viernes, 4 de septiembre de 2009

enamorada

cuidado que pringo. tecleo miel y algodón de azúcar. hoy estoy destilando dulce por cada poro. soy mermelada. hace dos años que la vi. hace dos años hoy que caí enamorada.

la ilustración de becca_williams podría ser una de mi pequeña. esa mirada. las arrugas. tanta ternura. cameladora. partiendo el alma. desarmando voluntades férricas. derritiendo fuerzas. encaprichando. como un cerdito. como un gato. una tortuga. enamoradora.

el caramelo que entró por mis ojos estacó mi corazón y ahí sigue. soy esclava de sus andares y ronroneos. presa de su estrábica mirada. adicta a su aroma. sus ronquidos. sus almohadillas, orejas y hocico.

aquel cuatro del nueve del siete la subí a un dieciocho prometiéndole un veinticuatro. invitarla fue la mejor decisión jamás tomada. sumarla a mi vida salvó mis días. el impulso más acertado. la locura más que sensata. la lotería afortunada. la idoneidad hecha perra. perfecta para mis huecos. hecha guante para mis hambres. mi receta. mi fiesta. mi aire.

a pompa le late algo mágico. le late deprisa _es lo malo_ y se acortan sus pasos. le late un tesoro. y llevamos disfrutándolo dos años.
cada segundo. cada minuto. cada día. todo latido, de ella, nuestro, mío, es todo un premio.

perdonad por lo edulcorado de mis frases. cepillaos bien los dientes tras el post. sólo por hoy hago público lo que siento a diario. pero entiendo que la dosis resulte más que empalago.
y es que por la preciosa pompa pierdo razones. no atiendo a poses. desato mi amor. para ella mi todo.
desde aquella mañana con sol de septiembre vivo plenamente entregada a una perra. soy _y lo son mis padres_ de, por y para ella. mi pompa. la nuestra. la más bella.

miércoles, 2 de septiembre de 2009

moët

lo desconocía. no sabía que los franceses que elevaba a las alturas eran de la misma familia. el sibarita dom perignon tiene por cuna y madre a las bodegas del que descorchamos esta noche.

antes de dar las diez de la mañana sonó mi móvil. en la segunda frase se me paralizó el torrente sanguíneo. tal cual. no exagero. que escuchar de buena mañana que vendrá otra cigüeña es mejor que cualquier otra nueva. andamos justos de ellas.

no me gusta el alcohol. y él lo sabe. cuando quiere regalarme chispas con _pocos_ grados sabe que las baratas botellas del asturiano con gaita hacen su efecto. ante una mesa repleta de botellas de todo tipo me brinda la exclusividad de mi sonrisa entre burbujas.
comenzaba nuestro curso del primer año. todo era nuevo. los viernes nos citábamos frente a un entonces único kebab _y no regentado por turcos_ donde cenábamos. para pasar el cordero _que sería recental o más añejo_ bebíamos de lo embotellado a la vuelta de la esquina. era nuestra princesita.
cuando aparece con el gaitero para que sople a sorbitos recorta la estampa de aquellos años. porque no existe ya la princesita ni su aposento. pero sí quiere devolverme al trono de esas risas y lozanas brisas de estudiantes en estreno.

habrá sido un minuto. pero eterno como los momentos cruciales de cada uno. ha sido un parón. la inmovilidad de mi cuerpo. el aire congelado y sólo las palabras al otro lado. mi silencio y su temor a mi ausencia. estás? más silencio. mi mano a la boca... y ahí va... pummm!!! descorchada.

esta noche _de haberlo tenido_ habría vaciado una tras otra varias copas del champán más exquisito. como término de un día en que me ofrecieron un gran regalo. como festín por mi sonrisa imborrable.

a la botella le presionas la testa para que su interior crezca. para que grite, cante, llore o bañe. mueves el corcho liberando lo contenido. y así ha ocurrido conmigo. cuando saltó esta mañana el tapón del minuto _como quedó el de simply_seductive_ he brotado en llanto feliz. henchida. respirando dicha. y perdiendo respeto al monitor, al teclado y a todo el papeleo me he hecho océano. muchas palabras y ninguna. tantas imágenes y todas juntas. y los años resumidos. y el galope de la vida.

tendrán un hijo. será papá como el moët chandon para dom perignon. y mis ganas de brindis por la futura venida beben de la botella coronada de aquella esquina, sorben del astur con el que me sorprende a veces y apuran del francés que abriremos cuando coincidamos _procuremos que pronto_ el que vi hacerse grande a mi lado y ésta _que aún flota_ y que cuidará de ese hijo tanto como del padre. felicidades, pareja. gracias por el descorche, amigo hermano.

martes, 1 de septiembre de 2009

vainilla

el pluriempleo me duplica los lunes acortando a su vez mi semana. la vuelta de vacaciones ha sido doble regreso por la misma razón. dan fe de ello mis tensados hombros, los kilos de cada párpado, las suelas más gastadas y las neuronas desentrenadas tomando azúcar disuelto en agua. sí, para sus agujetas, que llegarán.

los recuerdos son sabores en papel, en retina en bambalinas, en paladar, en la nasal, en las yemas o en lo erizado. dónde has ido? dónde has estado? has escapado? y cada uno contando su batalla. a las islas, al pueblo, a oriente medio, con coche alquilado, a la playa, con los padres, con sombrilla y al chiringo. el relato de cada veraneo se detalla restregando la espalda en la silla, estirando pantorrillas, extendiendo las manos queriendo alcanzar lo recién abandonado. pero sonriendo el moreno. que no se diga!

en mi repetida vuelta al cole no he podido contar mucho excitante. una gripe molesta y un bolsillo hambriento han alejado los planes trazados. y es que debí escucharme a tiempo... no resulta lo planeado. ni biquini ni reservas. no alta mar ni lengua sueca. pero tengo mi recorrido del peculiar estío. y el álbum de souvenires es muy mío.

de los tres meses que gozábamos de niños dos han sido de nota alta a pesar de haber madrugones. el tercero, de supuesta evasión, ha aprobado justo. así que, si hacemos evaluación del trío el veredicto es más que notable.

el flan tenía que ser de huevo. el otro me sabía a otro postre. no era flan.
este junio y julio mis postres eran del otro. no de huevo. la vainilla se coló sin comprarla en el súper. entró en mi nevera y se sirvió a diario. y descubrí que el aroma que regalaba la ramita fina y oscura _como las del manojo de sweet_paul_ podría ser canela fina.
ahora entiendo la falta de fuerza del tercero de los tres meses. agosto no me supo _además de por mi gripe y mis flacos recursos_ por la descubierta esencia.
la vainilla sabe de modo extraño. sus diminutas partículas aromatizan, calan e impregnan pero no inundan de intensidad lo probado. es raro. se percibe al comienzo. descansa en la boca. reposa. y se pasea. otra cucharada y vuelve el sentir delicado. pero cuanto más pruebas más pierdes. en lugar de ganar en fuerza desciende. no sacia y demandas más. recuerdas su primer regalo y lo reintentas. pero junio pasó y vives el siete. hundes la cuchara en el postre y pides porque no se esfume la fiesta. y ahí está... a punto. cuando menos te lo esperas. llega agosto, el ocho, y con el preparado emplatado caes en la cuenta. ya no es lo mismo. no sabe igual. no parece julio y ni por asomo es junio. no puedes recuperar aquel sabor incipiente que meciste en tus labios con el comienzo del verano. y se supone que tienes delante el mismo postre, idéntico plato. pero se perdió. está pero no se tiene. lo ves pero no lo sientes. y es que así es la vainilla. como el resumen de mi verano. como mi recuerdo. mi paladar mirando atrás.

dicen que pasado un tiempo la esencia vuelve a notarse. es como si estuviera viciado el ambiente. o mi gusto. o el palito perlado. como si tras lo sobado _y con aire y ayuno_ regresaran mis sentidos. y el otro flan. no el de huevo.