sábado, 29 de noviembre de 2008

tirarse

... y de nuevo cig harvey capta la idea que me rodea...

me ha llamado una amiga con la que compartí muchas horas de risas y de plan marmota hace escasos días. allí se encontraba hoy con varias disyuntivas. y aquí me buscaba con ganas de todas las respuestas. en su cama a punto de dar las nueve y media de la noche. y yo en mi portal sin subir a casa para no cortar la cobertura que aclarara sus dudas.

último sábado de un mes que huele a turrón desde hace semanas. último intento de retrasar el real invierno. y he salido a la calle con hambre de gente y vistas que ocupen mi cabeza que gira sin pedir permiso hasta hacerme caer rendida. la señora que me precedía ha reservado por fin el broche que tanto interrogante le ha generado. pasará a recogerlo. por qué se ha decidido por el sí? porque era el último... otro tipo de hambre. otras preguntas.

algunas pistas de tenis son para el verano. la vecina de arriba lleva retrasando las clases con raqueta de sus niños porque la lluvia ha decidido no abandonarnos. y si además no cubres estos días tu cabeza y vistes tus manos de lana estás perdido. igual que el pulpo el garaje y la del vestido y patines en la cancha verde pino.

una de las cuestiones desglosadas en la llamada era sobre lanzarse o no al hormigueo de posibles mariposas batiendo alas. pros y contras. y demasiados frenos por la que dice que nota que no salta. es como si intentara nadar sin querer mover los brazos. como ponerse trabas a un cariño que ansiaba. es rodar hincando la punta en los patines de antaño. como flexionar rodilla y posar el talón opuesto en los de hoy día. vía limpia delante de mi amiga y ella restando celeridad a su viaje.

tumbarse a mirar el cielo estrellado es para las noches de estío. ahora no que los grados negativos empañan la vista de los voladores sueños. echarse de día a figurar lo esponjado de las nubes es posible de abril a después de agosto. luego las figuras son los claros entre la masa opaca de nubarrones y si te tumbas a descubrirlas te empapas.

el otro debate ha sido para tirar de la manta. de la de la cama de mi amiga. de la que le atrapaba. cómo quedarse en casa cuando se tienen más de dos planes? cómo zanganear un sábado con mil puertas abiertas? cómo echar por tierra los señalados en nuestro extraño calendario? ella que resbalaba sus 34 sobre un colchón de uno cincuenta estaba esparciendo grava sobre su pista. y claro, no rodaba...

en la vitrina de la tienda de nuestra historia están los broches a la venta. si no preguntamos no escucharemos que no quedan muchos de esos. quizá incluso de alguno sea el último ejemplar. expuestos como posibilidades de este mismo sábado que respiramos. para ser escogidos o rechazados. y podemos dejarlos creyendo seguirán siempre a la espera o pedir que nos lo envuelvan. hacer de nuestra oferta sobre el mostrador una pista cubierta para todo el año o guardar las pelotas hasta el verano. reconocer figuras en lo alto de todos los cielos o sólo de vacaciones. seguir por la vía asfaltada en llano o desviarnos aposta por la sembrada de revuelta tierra llena de obstáculos.

el último sábado del último mes sin villancicos del año. la última proposición _quién sabe hasta cuándo_de galopar corazones si nos miran. última llamada _antes de apagar el móvil_ con planes en buffet barra libre. y qué señora, aún no se decide?

mientras preparaba la cena un mensaje de la que dudaba una hora antes _estamos yendo a lo de carmen_ y mi sonrisa ha ido aumentando con cada bocado. mi amiga había decidido invertir en su broche. gastar en lo expuesto por ser quizá el último a la venta. la manta a un lado y el abrigo bien atado. timbrazo a la vecina que se ha sumado a rodar por la alisada pista. y paso ligero preparada a devolver el golpe a las bolas que le lancen durante toda la noche. que su cancha hoy está techada porque así lo ve ella. tras las dudas.
tras vencer a lo gusano pedir que nos empaqueten bien lo escogido porque es lo que decidimos lucir durante las horas que nos presentan. tras entender que si hay oportunidad hay vida. y no hay que echarla a perder tumbada en plena pista. escoger bien de qué vestir nuestros momentos y lanzarse sin frenos. porque si hay piscina con agua es mejor tirarse y de lleno.

jueves, 27 de noviembre de 2008

acción


para millones de personas hoy es el día de acción de gracias. cuarto jueves de noviembre. para la que ahora teclea al galope es día de acción. las gracias para otro momento. muy amable, muchas gracias...

el dolor de cabeza ha comenzado a instalarse sobre mis hombros a mediodía. tumbada sobre la cama he imaginado que era una de esas lámparas con gotas gigantes de aceite que van luchando contra la gravedad por aquello de la diferencia de densidades y sus ganas de salir a flote. me he sentido como una de ellas y que me tumbaba con la intención de detener el ascenso hasta mi testa de las burbujas coloreadas y malformes. mi cabeza no iba a soportar la tarde laborada con esas masas aceitosas subiendo sin parar. en horizontal las he repartido por todo el cuerpo ralentizando su ataque burbujeante. pero anuncio que ha quedado en intento. el mal ya estaba hecho.

hasta abrir mi nuevo post _que hoy daba por perdido_ me revolvía en la cama. como si de noche de luna llena se tratara. como si mañana fuera a escapar de viaje. como si una sorpresa fuera a ser abierta con el alba. inquieta. y así están mis dedos ahora. escupiendo lo que mi coco no deja de lanzar de un lado a otro removiendo mi gris materia con ganas de acción. ya os lo he dicho. mi noche de hoy no es de gracias. no tiene ninguna...

en el último escrito hablé de gallinas. hoy tocaría hacerlo de ratas. que no las he visto pero he sabido de alguna que otra. y el hecho de conocerlas me ha revuelto el pensamiento hasta levantarme la jaqueca.
donde yo trabajo hay muchos alfileres. el suelo entarimado sin barniz acanala caminos de metros y metros de largo. surcos por los que se suelen colar estas puntas cabezonas y a los que acuden mis ojos cuando busco distraer mis neuronas. donde yo trabajo no hay muchas personas _lo cual me gusta_ y estoy tranquila. así que cuando el destino azota con una plaga ratera como la de hoy saco partido de la intimidad y paseo buscando cabezas plateadas entre las maderas. como un niño chico rastreando bichos así me he visto. respiro hondo tomando aire para frenar mis impulsos a raquetazos por mi cabeza y de pronto un brillo. me agacho y lo pillo. ya es mío. un tesoro más a su cajita. y yo satisfecha de la pesca. qué tontería...
escribía de las ratas del día de hoy. son de las que no cabrían en lo acanalado del pavimento tarima. ratas gordas, feas. nada de señoras ratas. no, de señoras nada. ratas sucias peseteras. cómo diríamos hoy? euronas? euronistas? euroneras? bueno, acuño euroListas que es lo que son. evito detallar la razón de mi descubrimiento acerca de ellas. os diré que son de las de la pela es la pela. y con eso yo no puedo señores. que no.

siempre digo que conmigo no van ni las mentiras ni los egoísmos. no comulgo con ninguna de las dos cosas. pecaré de ambas como imperfecta que soy _alzo mi mano_ pero de manera escogida y razonada no. no sería yo. y como no lo admito desde mí tampoco caso con quien me lo ofrece. así que los que me viven saben que ni una cosa ni otra mi aplauso merecen. pues bien, esta mañana he comprobado que la rata en cuestión reunía las dos facetas. la cola mentirosa y los dientes roedores egoístas. terriblemente fea la condenada.

ahora que venden muñecos para atravesar con pinchos con intención de perjudicar al objeto de tus in_deseos podría hacerme con uno en forma de roedor de alcantarilla. y con mis alfileres cazados en los ríos cortados del árbol darles profundo para ver si expulsan lo tan podrido que les rellena. más bien ahueca.

ni egoísmo ni mentira. de las dos cosas tengo un radar y un cuerpo repeledor. fuera de mi círculo, por favor! a estas horas de la noche ya he ordenado a mi cabeza que asimile la expulsión de las ratas recién descubiertas. que si bien no puedo hacerlo de mi vida oficial, aprovecho que nos separan kilómetros de distancia para jugar a que no las veo. justo lo contrario que hago con los delgaduchos de plata del suelo.

una amiga mía de las gordas _quizá por eso supo de mi característica_ apuntó un día que lo único que sabe que no se me puede hacer a mí _si después se espera perdón_ es traicionarme. al escucharlo ladeé la cabeza como lo hace mi perra cuando le pregunto algo haciéndome creer _ilusa por amor_ que me entiende. me detuve y lo interioricé. sería verdad?
años después de aquella observación he comprobado que los que me han regalado traición han sido desterrados de mis días. tenía razón mi amiga. sin retorno. sin remisión. noches de acción.
dentro del pack del que traiciona aparecían la mentira y el egoísmo. carne de cañón. demasiado para mis venas. no soportó mi corazón.

a las ratas que hoy han invadido mi cerebro les libra que no entraron nunca en mi mundo de pleno. estaban de lado, de paso. y su paquete conjunto de falsedades y ruindad no sumaba para llegar al grado de traición. para eso hace falta más...
así que aprovechando que en el portal de mi casa ha colocado el ayuntamiento un cartel anunciando una limpia antiplaga les haré saber que quizá deben viajar un tanto más lejos. que quizá donde vive la que hoy enseñó sus dientes míseros no existen las batidas raticidas.

martes, 25 de noviembre de 2008

gallinas


varias. hoy he visto algunas gallinas.
frente al espejo la primera. desde bien temprano la ansiedad ha decidido aplastarme contra la cama y se ha atrincherado. dopada y pensando en mi gente he intentado resistir su atropello. lo reflejado desde que empezó la jornada me lo decía bien claro. hoy no es tu día.
un pitido a intervalos irregulares desde el pasillo anunciaba la existencia de la segunda. mi pompa juega seleccionando cada vez con el muñeco con el que pasar sus ratos. la gallina _o quizá gallo_ de plástico ha resistido sus mordidas antes de la comida. tendría hambre la niña?

las hay ponedoras. las hay de carne. las hay destinadas a proporcionar tanto lo uno como lo otro. hay otras que se les conoce como aves mejoradas. las hay cluecas. y luego está la caponata. la turuleca. la cocoguagua. y la de los huevos de oro.

hay una casita orillada en una estrecha carretera cántabra donde vive una señora en compañía de sus libres gallinas. asomada a la ventana más alta en pleno centro de la fachada saluda una a todo el que pasa. allí vivirá una de mis amigas. se enamoró de la mágica construcción destartalada a su albedrío y solemos jugar a imaginar cómo criará allí a los únicos hijos que planea. sus gallinas.

pero estaba recontando las que he visto hoy. y toca la tercera. ha sido antes de comer cuando supe de su presencia. tras intentar quitar la vida a la que me devolvía el espejo he mandado un pensamiento epitafio por sms para la lápida de un fallecido que para otros vive. la pelota sin raquetazo de vuelta me ha remarcado en fosforito que lo ha recibido una gallina _corrijo, un gallina_ que lo dice el subrayado amarillo pollo del que cavó su propio hoyo.

las hay en pepitoria. al chilindrón. las hay de caserío alimentadas de maíz. las hay al horno con la tripa rellena de manzana o de limón.
las hay en el cocido del pueblo que me acogió tantos años recientes. y las hay en las croquetas que hemos comido tras las lentejas. esa era la cuarta de mi día. la gallina número cuatro.

a media tarde, cuando las toneladas sobre mi tórax sucumbían a mis esfuerzos, me han sorprendido con un sueño. allí estaba yo boquiabierta escurriendo mis brazos por el aire que de pronto se había congelado mágico. frente a mí una obra de arte que creí inalcanzable. ella y yo. solas en la reducida estancia espantando la pesadumbre que arrastraron mis pies desde que se despertaron.
¿cómo vestiría una muñeca recién salida de una cajita de música si esta fuera la de la casa de la carretera? ¿cuál sería el vestido de una princesa que juega a enjoyar las gallinas? ¿cómo sería el atrezzo de la niña que de pura felicidad se pavonea?
allí estaba la respuesta. la prenda arte con la que prendarme.
etéreo y volátil por partes. rotundo y clueco por darte. tachonado de piedritas de colores, encajes y ondulaciones. blanco puro para lo corto y para lo tapado flores. aire del campo subido al pecho. nubes de gallina esponjando andares. y todo sumado con hilos maestros alzando la costura a lo más grande.
delante de mi hasta entonces presencia pita la montaña de mahoma encarnada en el traje con el que vestir los cuentos. en concreto el de hoy. el de la muñequita princesa que anduvo jugando con sus gallinas albinas para echarle a la vida _sin miedo_ la clara con yema del huevo.

lunes, 24 de noviembre de 2008

pupila

me gusta. dar con ello o reproducirlo. caer en cuenta al instante o tras años de velado conocimiento y acompañado de la sorpresa infantil. me imantan los dobles sentidos.

me gusta que me miren a los ojos cuando me hablan desde dentro y no me esquiven. me gusta que me enseñen. clavar la mirada y clavar lo aleccionado. ser pupila. ser pupila.

la noche del jueves describían mis ojos como los de un cómic manga quizá con la intención de desviar la atención de mi estrenada herida nasal izquierda. el viernes combatiendo mi fiebre tras la vacuna los párpados agrandaron mi mirada aún más. atendían lo que al otro lado de la mesa con refresco, caña y patatas me decían. pupilas de una pupila.

me gustan los peces. no me gustaban pero ahora me gustan y mucho. los peces y los pescados que no los veo inertes. ordenados en su mar de hielo escarchado en la rampa del mostrador de la pescadería me llaman con la mirada. con uno de sus ojos hacia mí como en un guiño. el otro, el acostado sobre el frío de su tapiz de venta ni lo intenta. me observan con uno porque el otro lo reservan. me estudian mientras el ojo no visto repasa lo que vivió en su otra vida _allá entre las mareas donde les tendieron las trampas y cedieron por prender como locos lo que a los ojos les tentaban_ con pupilas que no aprendieron el mal.
me gusta que me miren los peces. y el ciervo de powder y el de anatomía. que me observe la perra que me mordió jugando el otro día y _cómo no, me vuelve loca_ que lo haga la mía. me gusta que me mire el conocido, el extraño, el amigo, el incógnito. que me mire mi vecino. que me vea y mire cualquier ojo y que yo lo vea. y me gusta por cruzarme con cada uno de sus adentros. por entrar en ellos. por penetrar en otros mundos hasta ahora ajenos y aprender de nuevo. pupilas atravesadas para que yo aprenda mientras _quizá_ me estudian.

con los ojos puedes dar la mano y hasta acariciar estremeciendo. puedes con la mirada escuchar la vida y aprender en silencio. las usas y a la vez eres. en nuestro idioma y en inglés. el desdoble de lo atribuido a la palabra para la parte negra de tus ojos y para etiquetar tu actitud humana.

recuerdo con cruel exactitud la mirada de persona en demolición que buscó mis ojos reclamando aclarar los segundos que duraban las escaleras. dolió entrar en su agujero incrédulo. estábamos en la universidad.
no olvidaré jamás el marchito mirar de aquel abuelo que apenas reunía resuello para esbozar palabras mientras la muerte le esperaba sobrevolando su cama. abrigué su gélido silencio interno con canciones del pasado. estábamos en un hospital.
tengo clavadas en la mente cada una de las miradas que me abrazaron cuando hincaba mis rodillas. escapar dentro de cada uno colándome por sus ojos me salvó de mi propio laberinto. estábamos en pleno frente.

busco ahora la biblioteca de una escuela donde ordenadas por fichas se archiven millones de pupilas con intención de mirar y enseñar. ando detrás de materia para aleccionarme más. quiero ojos donde entrar. miradas para atravesar, entender _o no_ y con ello sumar saber. y devolver mirares invitando a que entren e intercambiar lo que llevamos dentro, lo que no vemos si no miramos, si no damos uso a las pupilas. si no somos más que maestros sin vena pupila.

en plena oscuridad, en el desconocimiento, en la desazón de la sinrazón quiso aprender la pupila. en lo denso de la ignorancia esforzó sus ojos por reconocer cualquier objeto. se diluía lo espeso con el tiempo revelando cada vez más descubiertos... mientras dilataba sus pupilas... mientras se abría.

domingo, 23 de noviembre de 2008

souvenirs

en realidad no lo son. o sí. estoy dudando. un souvenir es un objeto como recuerdo de un lugar visitado. y quiero definir algo parecido. pero no es tan exacto. o sí. tal vez sí me hagan recordar un espacio aunque quizá no sea geográfico.

he vuelto a casa con la maleta menos pesada pero con añadidas nuevas cargas. y para sumar pesar a mi regreso el enfado en reproche de mi preciosa pompa. tras los iniciales saltos ha salido su castigo también al recibidor. domar su gesto insatisfecho ha sido la última tasa a pagar tras mi fugaz viaje.

cig harvey lo sabe _y advierto que confesaré más adelante que conoce mucho de mí por las instantáneas que nos regala_ su cámara relata lo que vengo pensando.

mi primera visita a urgencias como paciente. un libro más destripado. una despedida entre pasteles. la sonrisa de un bebé mirando a su tía. cuatro chicas nuevas. y las cinco cosas bien empaquetadas.
la vuelta al hogar de una niña perdida sonriendo feliz enmarcada en naranja. unos vasos a estrenar en un bar oxidado. un sms _por los pelos_ no enviado. la comida _en el bar de al lado o en un mexicano_ arreglando de nuevo lo humano. y envueltas en papel de seda las cuatro.

si digo que estoy con un hueco frío atravesando con su oscuro los límites de mi cuerpo diréis que no sumo. nada nuevo en mis escritos.
en cubierta del barco de vuelta están apiladas las sillas. y descalza _como a mí me gusta_ me siento sobre ellas. no se me hace extraño. es lo resultante de los años. aprenderes apilables y desde los centímetros ganados la percepción de los objetos recuerdo.

mi nariz mordida por una perra recién presentada y ya querida. los abrazos de sus vecinas, amigas y la madre que no la parió. y una cena desatando los nudos con ayuda de las demás manos. y protegidas las tres cosas con plástico de burbujas.

si explico que me he dado cuenta de que ahora cedo a los planes desviados, que ya no protesto ante la vida que regala heridas, que me hago fuerte ante el fracaso del héroe... podemos decir que esto se va arreglando. y doy más y sumo y sigo.
sentada. tranquila descanso sobre lo acumulado. sobre la pila de sentimientos en asiento. estudio las capas y adivino entre ellas la figura de cada souvenir transportando mi firmeza a la lección en cada lugar y en su determinado tiempo.

dos amigos en un mensajes cada uno coronados con una moña. en ambos el abrazo más largo por fuerte, por suerte, por bella, por ella.

sumo. y que a mí sí que no me da igual. no me quedo indiferente a ras. me subo porque sumo.
y he ganado _y mucho_ a pesar de haber perdido _un infinito_ así que a mí sí que me vale. y por ello sonrío a pesar del agujero negro que a ratos no esquivo y siento.
reposando los brazos sobre los costados de las dispuestas en torre aplaudo la gente descubierta. los corazones aún despiertos. abiertos. sin desiertos. y sedientos.
descansando mis recientes décimas de más por combatir el temido tétanos sobre la última silla inspiro llenando mis pulmones de lo sincero entre los que siguen conmigo. los que me acogen. que me arropan. me acompañan. me escuchan y frenan y elevan.

un regalo para una amiga. un cumpleaños mañana día 24. un souvenir de mis esfuerzos, mis adentros, mis vivencias, lamentos, yuxtaposiciones, párrafos y silencios. un presente que debo hacer y sin embargo otro hubo que se me hizo. _si no te conociera, si no supiera que no puedo con quién está detrás iría en su busca por todo el mundo hasta dar con sus dedos escritores para anillarlos en casamiento_ un reconocimiento al alma que sigue terapia en la soledad del teclado, un elevar el orgullo de tantos decires sin compañía, un te quiero aunque no fueras tú, un regalazo, un subidón, el abrazo gordo gordísimo hasta llenar el cazo. y en un portal al despedirnos, sin papel de flores ni lazos, con el aire entre las palabras como embolsado. cómo competir con semejante souvenir para el día que cumples _amiga en carcajadas_ tus aún universitarios _sin no fuera por las canas que ganas_ 36 años...
feliz día! que sea lo más gordo posible! y que yo lo pueda ver desde la distancia subida a mi recién añadida silla.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

equipaje

en breves horas marcho y aún no tengo nada preparado. miento, he cogido un brick de leche sin lactosa que es la única que mi cuerpo tolera. bueno, esa y la de mis pompas.
cuando he visto esta imagen de kristin pereres he retrocedido donde no he debido. y en lugar de aquí estaba allí. mi maleta se hallaba sobre la cama amplia con el edredón aún revuelto. la otra maleta en el suelo. la harían luego...
faltaré tres noches al beso _previo a morfeo_ de mi pequeña. fallaré cuatro días a los achuchones con los que le asalto tras las siestas. no se me puede olvidar el cargador ni las medicinas para la migraña sigilosa.
dos cucharas en la fregadera. dos soperas aún en digestión a la espera. y mi cerebro puñetero que las coloca en la cocina que no debe. y reproduzco la lectura de la lista sobre el trozo de papel blanco donde anoté lo que llevaría. siempre lo hacía.
escapo de mi nueva urbe para cargar los pulmones que vacié hace unas cuantas noches. estoy confirmando citas. comida con uno, cena con otra y por fin presentarme a mi sobrina. sus regalos! tengo que empaquetar lo que le llevo y con todo a la maleta.
la cotidianidad de la foto me habla de lo que hubiera pensado en aquel momento al que mis neuronas se empeñan en huir. total, para sufrir. uno cualquiera en realidad. uno de tantos. repetidos. y ya no repetibles. pero para mi materia gris sí reproducibles... _tenemos que cortar el agua_no se nos olvide regar las plantas_bajar los estores_cerrar bien las ventanas... y esos cubiertos del fregadero... luego, luego...
en casa se quedan dos. mi madre y nuestra perra. y de sobra sé que se harán buena compañía. y alternarán los cuidados. a ratos intercambiarán el rol de enfermera. y se abrazarán en las siestas. comerán a deshoras y harán trampas. es lo que toca, que jueguen de oca a oca y tiro porque estamos solas. el pijama, como no lo coja ahora se me va a olvidar.
hace frío donde duermen las cucharas. y en mi viaje a lo inexistente sé que por fin olvido lavarlas y dejarlas en su debido sitio. nos vamos de casa girando todas las vueltas del cerrojo y queriendo terminen ya las que darán las ruedas de nuestro coche.
temen y temo cómo sea mi vuelta el domingo. dicen que irán a recoger mis cachitos. así fue la última vez que escapé. pompa rascó mis piernas mientras yo alcanzaba a asir mi maleta y me abracé a su cuerpo fibroso como a la boya en mar azotada. sus ruidos me confirmaban mi vuelta e intenté tapar con ellos los aullidos de mi regreso del campo batallado al otro lado del mapa. el neceser y ropa interior. qué más falta...
dos. la pareja de los cubiertos de un primero siguen diciendo más de lo que no vivo ahora. las dejé con reservas. quedaron con la panza llena de un líquido que no identifico. y a nuestra vuelta ambas en el mismo sitio y con la marca del hambre que ha reducido la huella de lo que quizá pudo ser cocacola. toca lavarlas. ahora que estamos de vuelta y levantamos las persianas. habrá que frotar duro porque espesó el líquido. pero para eso habrá que abrir las llaves de paso del agua... parad! ya basta!
echaré en falta a mi par estos cuatro días de viaje. las dejo juntas y al calor de sus abrazos. extrañaré a mi pareja de primera. a mis dos. a mis niñas. y yo aún sin equipaje... pero nada en la fregadera.

martes, 18 de noviembre de 2008

descuida

os acerco un cuento que ilustró _sin conocerlo_ wilhelm staehle. es el relato de una caperucita versionada. está la niña. está también el bosque. pero en lugar del lobo malo aparece el oso.

pompa está de nuevo con el celo. ocho meses de respiro nos ha dado entre su anterior _y primero_ y éste. la perra está aún más pegajosa que de costumbre. en casa luce pañales talla cuatro de niños en gateo _será porque ella no ladra y le gusta el pescado_ y en nuestros paseos atrae a los canes cual perrita con su flauta reproduciendo las sirenas de ulises en canto.
así se acercó la niña del cuento al animal peludo del bosque. era la miel de su cántaro merendada cuando los demás empezaban la cena. fue su mullido arropo que abrigó sus noches destapadas. el rugir de su fuerza asustando a todos los malos de la oscuridad brochada entre castaños. la pequeña entendió enseguida que el cuadrúpedo sería su guía. con la varita en mano le dijo _tú serás mi guarda_ y esquivaron las zarzas y trampas de las sendas mientras reían. poco importaba dónde acababa lo verde y dónde le esperaran.

mi preciosa pompa está _si cabe_ aún más bonita con su trasera protegida marcando bien su andar zambo. mientras le desayunaba con la ración de mimos que merece ella se estiraba y giraba su cuerpo dejándome para el bocado su vientre. _pero es que yo te como!! y cómo!!!_
eso debió pensar el oso al comienzo de todo. cuando los andares de la niña le enamoraban. cuando cansada caía rendida sobre lo blando de la madriguera. eso pensó al ver su piel sin pelo osezno. cuando se agachaba en cuclillas para observar los peces del río. cuando le pedía le alzara en vuelo. ese debió ser su pensamiento. al comienzo...
la tentación. la vida animal con hambre insaciable pide cada vez más y más. como empiezan a pedirme mis mordiscos al acercarme a mi pequeña pompa de leche... así le empujaban las garras de sus adentros al oso cada vez más temeroso.
miedo de hacerle daño. miedo de robarle lo más preciado. _nooooooooooo... mentirOSO!!!!!!!!!!!!!_gritad niños del mundo. gritadle a este animal malvado que quiere hacer daño a la niña...

todos los hermanos mordemos a quien queremos. directo de mi padre viene heredado. él nos mordía y sigue haciéndolo en cuanto nos descuidamos.
ahora muerdo a mi pequeña. así lo hago desde que tuve la suerte de que entrara en mi cuento diario. y a pesar de saber que es el amor loco el que me empuja a hacerlo me consta que no es más que egoísmo. qué gana si no el mordido con ahínco más que una marca del instante arrebatado?
así fue como el oso escudado en un amor protector de animal con instintos incisivos dio sus últimos mordiscos a su niña mientras le decía que le quería. le dijo _descuida_ y que eso era amor y no hambre.
_trampOSO!!!!!!!!!!!!!!!_ gritad con fuerza niños que el malo se comió a la niña...

a mi perra le gustan _soy aún más afortunada por ello_ todo tipo de mordiscos. los suaves y los ariscos. los recibe como un juego y para ella eso es el amor. así que si una mañana de arrumacos me da por llevarme a la panza un muslo trasero de mi gorda no tendré para ella delito... que no soy yo la que busca excusa para el ataque animal. que no busco escudo que justifique mi deseo de engullir a mi preciosa pompa por partes. es el juego marcado por ambas. son nuestras reglas.
y en nuestro cuento vale comernos la una a la otra. igual que la otra a la una. a las dos. y a las tres. que aquí no hay engañados con los dientes afilados zampándose a inocentes niñas por los pies.

ay niños... por poco olvido el final del cuento. donde en el bosque del colorín _colorín! colorín!_ colorado el oso sigue paseando ya sin niña porque logró escapar de sus tripas. y de vez en cuando hay quien ve al animal vagando solo y triste con un agujero dentro con forma de niña. y ahora sí... colorín colorado que este cuento del oso tonto _por fin_ ha acabado.

lunes, 17 de noviembre de 2008

francesca

no se alarme, señorita, si de pronto cree estar caminando sobre lo avanzado. no le asuste la sensación de desandado. en realidad es sólo eso. un sentir.
como la lluvia sobre el parabrisas del coche. como las gotas perfilando el rostro del que espera. como el puñal atravesando el pecho de la que se frena.

no es anormal albergar la duda. es como confirmamos el ejercicio ensayo error. es ciencia en vida pura.
como la comisura que no acierta a dibujar lo que debe. como el puño diestro aferrado al futuro que no tiene. como la luz marcando el giro que va y que viene.

no exija de más a su fortaleza si tiembla por verse en encerrona. cuando pisa decidida y luego desacelera por faltarle la entereza. no se castigue. no es flaqueza.
como tampoco lo es el amor por los otros, la generosidad junto al sacrificio. como no lo es la comprensión del que espera. ni la llamada sin respuesta.

no tema a nada de esto, querida amiga. todo cuanto usted siente lo produce su cabeza. tanto la marcha larga sumando capas como el salto al vacío que intentó olvidar. son torturas en minutos que se nos antojan eternas.
como el crujir del trueno en la tormenta. igual que lo breve del frío del metal cuando lo asimos tensados. como las lágrimas pidiendo escapar en grito silenciadas por la imposibilidad.

y es que como bien dice, está forjando lo que ha de ser para sus días, con todo lo que ello suponga. y ahora que porta sus miedos cual dermis más externa irán restando amenaza a su vida. acierta al confesarse más vulnerable y con los contrafuertes debilitados pero son esos fantasmas personales los que le regalarán control sobre su propia esencia.
como francesca callando sus voces. como su mano aflojando lo que a punto estuvo. como sus ocho días resumidos en segundos. como la puerta que deseó abrir y contuvo. como lo que pudo.

sábado, 15 de noviembre de 2008

nariz

... absténgase de leer este post quien porte una sensibilidad incapacitada para el hedor de la muerte...

antes de las dos he visitado al veterinario de pompa. pasaba por delante y quería saludarles. _aquí huele a vaca_no. no es vaca. vienes sin tu niña?_pasaba a desear buen fin de semana_ pero sin tu pompa_huele a leche de vaca_ que no es eso_ pues a cuadra!

las cinco tardes de curro liviano han permitido dar por terminado el libro que me regalaron. he devorado cada párrafo. mis ojos seguían atentos cada línea como al dedo índice cuando aprendemos a juntar palabras en lo escrito de nuestros primeros cuentos. he devorado la confirmación de tanto...
y ahora comprendo mejor las ausencias. las idas repentinas. los fallecimientos. a medida que restaba páginas por delante me situaba más al frente. y sé lo que decir en cada responso. lo que reza cada esquela. sé bien si deben ir o no _y cuántas_ coronas. y el tipo de flores. y sus colores...
trillado el libro entre mis manos que sostenían el reciente muerto, hoy sábado del mes de difuntos he acabado con lo que fue una era de la que era. y si tiempo atrás fabriqué la mortuoria caja para guardar lo que ya no viviría, estos días he dado tierra y a punto estoy de sellar la losa.

_se llamaba nick_ chiquitín... _no era pequeño, eh? era muy grande y además ya era muy mayor_

debo repasar lo escrito por quien estudió el tema. debo también hacer sabedor a quien me acompañó al comienzo del paseo fúnebre. hace siglos... parece...
resumir por escrito y en mi mente. un legado de lo que ha de restar tras la vida confirmando que sí que hay un más allá. que tras el túnel del sufrir inmenso hay un fin. y eso tengo que registrarlo cual epitafio.

_y vuestro gato nota algo? te has fijado si se comporta de otro modo?_

hay duelos y duelos. los hay largos, de negro, con mantilla, de pueblo. los hay eternos, desnudos, por el desierto.
asumir la muerte con todos sus tonos y olores. un golpe, el shock. un día. el mes. aniversarios.
etapas donde cierras tapas. fases sufriendo desfases. caminar sin fuerza para el frente y sin entender bien dar marcha atrás.
y por mucho que te avisen, por muy alerta que nos pongan los que de eso entienden y nos atienden... nunca olemos lo que se nos viene encima. cómo reconocer al cadáver entre los compañeros de clase...
podría ser un mes por dedo y aún así el golpe es eternamente seco.

_ha venido el matrimonio a traerle_ carajo de vida suela...

lo confieso. tenía entreno. y hasta mi cuerpo está que no da crédito. y yo sin saberlo...
sangré sin sangre desmontándome literalmente por dentro. mis órganos fallaron en cadena mientras me flaqueaban las piernas. el frío junto a la ría era calor junto a mis dentros. atraqué el aire que se me cruzaba y lo devolvía vomitado a destiempo. crují en cimientos. y fallecí.
doce horas más tarde mi inerte vida comenzó su latido. y resucitó por lo aprendido todo el tiempo vivido desde que me supe muerta por vez primera. supo hacerlo ella, que no yo. fue mi subconsciente quien se alzo y caminó sin heridas de más no dejando entrar a plañideras en el funeral. las lecciones de los maestros calaron de modo que esta vez no mojé de más mi rostro. y así me enmarca mi interior fuerte. retrata mi autoestima y coraje frente a los yacientes del camino.

sobre las doce de esta mañana una joven recogía su vestido de novia para su boda el día seis en burgos. blanca vida.
en la manzana vecina un perro entregaba su cuerpo que por vejez programaron hoy dormiría. perra vida!... eso era lo que yo olía!!!

viernes, 14 de noviembre de 2008

rincones


antes de comer hemos conversado tumbadas en la cama. sobre el colchón ella busca el hueco entre mi brazo diestro y mi tronco. alarga su cuerpo de leche y busca mi hombro para apoyar su recortado perfil. por eso ha empezado todo.

mi abuelo materno era aficionado a registrar cosas ciertamente insólitas. recuerdo aquel día marrón y amarillo _así pinta aún en las fotos_ en que despidió lo que deconstruían frente a su mirador. desde su apodada salita de benidorm capturó los ataques de una gran bola contra lo que pasaría a un borroso recuerdo.
sería el 81. quizá el 83. más no. y donde se levantaban aquellas viejas casas de escasa altura elevaron lo moderno. nuevos tiempos.

sabes? creo que de algún modo todos tenemos un rinconcito. como tú buscas tus preferidos anidando tu cuerpo entre el mío así lo buscamos todos.
yo tenía uno. mi más_mejor_preferido. y a pesar de no estar siempre en un sitio y de que de cuando en cuando lo movieran, cada vez que daba con él confirmaba que era el mío.

éramos muy niños cuando lo de las fotos. el derrumbe no escoció en nuestras inocentes mentes. sabíamos sin embargo que se nos robaba la curva escondite al final del tramo largo de la calle justo llegando a nuestro parque. si quitaban las casas allí no habría más juego. y eso cambió mucho la ilusión infantil de aquellos tiempos. no sólo era un rincón entre edificios de pueblo, ni una parte de vida de un abuelo que demolían. era también uno de los recovecos de muchos niños.

una íntima amiga diaria me contó que su hijo menor tenía varios refugios escogidos en su casa. tenían que mudarse en breve y le asustaba privarle de sus privados con el cambio. eran tres los sitios que el niño de menos de dos tenía por suyos. y en ellos se escondía cuando nadie lo esperaba buscando quizá su soledad. y me dijo su madre que lo hacía marcha atrás. cosecha mía fue añadir a sus movimientos el motivo de buscar proteger su espalda, allá donde no alcanzaba su mirada. el pequeño polizón tuvo la fortuna de que sus padres dieron con una nueva vivienda de casi idéntica planta y con el cambio de casa pudo reproducir como un calco sus rincones. la suerte del principiante.

cuando me siento en el suelo buscas hueco entre mis piernas _cruzadas cual indio_ apoderándote de ese trozo de mí. porque desde que estamos juntas es tu casita. es tu nido, verdad? pues si me llegan a hacer escoger el lugar donde mejor me encontrara en el mundo escogería el rincón del que te hablo. pasados los años... mi sentir seguía intacto.

en la casa donde vivieron esos días mis abuelos están los pequeños álbumes con visiones en retroceso. nuestra infancia en papel fotográfico más que amarillento. y entre tantas imágenes rescatado un rincón de nuestros juegos. es verlo y dar el salto corriendo esperando no den con nuestro menudo cuerpo...

que cómo es mi rincón? bueno, ya no es. dejó de serlo al menos fuera del papel de mis fotos en memoria. pero de algún modo lo llevo dentro. te cuento. era un árbol grande bajo el que me escurría _como un cubo de agua_ esperando el instante de arropo de sus brazos. aquel abrazo era mi casa. allí podría quedarme eternamente.
y qué pasó? _me pregunta con su estrabismo aún más marcado_ lo talaron?
en realidad fue el árbol quien decidió cortar las cuerdas del cubo. no dar más agua. dejar de ser lo que era. escapó _y no se sabe bien por qué_ de su condición innata. y se esfumó mi sitio escogido. me lo robó el mismo rincón. pedazo ladrón...
me lame la mejilla y entre sus ronroneos alcanzo a entender que buscaremos juntas otro lugar. otro hogar. y se ovilla de nuevo entre mis huesos como ofertando algún posible rincón.

y es que en qué estaría yo pensando hasta ahora...
las pompas de leche _aunque redondas_ tienen para quien los requiera sus propios rincones. y ahí estoy ahora yo.

jueves, 13 de noviembre de 2008

arte

dije que os informaría de lo que me dieron como premio a mi puesto vencedor en el concurso.
arte. esta pintura de holly farrell llegó a mí desde ontario. ese fue lo logrado por aquel desnudo.

durmiendo la siesta_bailando en la fiesta_nadando en el mar_fumando después del café_fumando después de_después de la tarde.

tres días leyendo un libro que también recibí como obsequio. los mismos días que desearon _sin confesarlo_ lo estuviera devorando para aliviar mi insaciable sed.

cuando se enciende la noche en el monte_cuando cruzamos mi ciudad en coche_mientras que suena el casset...te_con su voz ronca de jac...ques brel.

dos comentaristas. dos y uno de ellos por duplicado. con la racha que llevan las pompas sin respuesta puedo decir que están de nuevo flotando. lo tomo como un muy dulce regalo. fuera de concurso _o no tanto quizás_

mirarme en tus ojos_oírte charlar_dejar que me peines.............................................
........................................................................................... en vez de pensar_dejarme abrazar por cualquiera_que sepa mentirme_que bese con fuerza.

una baldosa bajo uno de mis pies. una visita sobre las seis. un mensaje que me despierta y otro que me acuesta. y así _como aconsejaba mi abuela_ hasta cien. para tener un pelo sano y bonito has de cepillarlo al menos cien veces cada noche_decía mientras estrellita castro era la tercera de nuestra sala. han peinado mi pelado con el trocito de solado, la aparición sorpresa y los sms inesperados.

volver a tus brazos,_sentir tu rechazo_gritar hasta quedarme afónica_llorar hasta que me entre la sed_beberme un buen vino y poderme comer un bistec a la plancha.

una bandeja de buñuelos de crema de mi sitio favorito. como ahí en ningún lado. caricias de una madre regalándome su pensamiento más allá de lo obviado. uno de tras de otro _con su canela y aroma alimonado_ hasta el empacho.

dormir cien mil horas_soñar que me quieres_y no hacerme daño el pellizco

y visitas de gente querida en sueños. recién recibo un sms donde me dicen que esta noche entrarán en mis sueños para bailar un pasodoble y fumar un peta _en sueños igual hasta le doy_ para reírnos sin parar...

volver a encontrarte a mi lado_volver a abrazarte_y desayunarte

si me giro doy con ella, con su cara o con la pompa de mi pequeña. y la abrazo. y me la como. de merienda, cena, almuerzo, desayuno o aperitivo. está buena a cualquier hora.
y juntas damos repaso a lo que nos han dado _por todos lados, dice ronroneando_ y cerramos nuestros ojos y nos dejamos peinar. que nos cuiden como princesas que algunos ya dicen que somos nosotrash.

esto sí que es arte.

olvidar

clementine decidió borrar a quien amaba de su memoria. un proceso extraño le hacía desaparecer todo rastro en su materia gris. sus neuronas no recordarían nada de su hombre. fue lo que le aseguró el equipo al que entregó sus recuerdos.
él también se sumó al proyecto por despecho. por la raja que abrió el plan descubierto.
un intento tras otro. y siempre desconocidos. los mismos que no se reconocen tras tanto tiempo vivido...

una playa desierta en montauk o un río bajado de grados sobre el que reposar bien abrigado. escenarios gélidos y abandonados para vestir el doloroso suceso en sucesión.
olvidar...

eternal sunshine of the spotless mind me congeló y no cesé de sentir y pensar. y hoy retorna a mi mente con su lucha contra lo evidente.

clementine tiñó su cabello de cielo pero en su nombre luciría inevitablemente el color que para otros siempre sería. y decidió planear borrar lo ocurrido y comenzarse de estreno.
un tren nuevo. lugares lejanos. kilómetros distanciando. cambio de gentes, ropas, hablares y días. pero no contaba con lo poderoso de la vida. camuflada en una canción, en un gesto, en un aroma, nos dispara sin defensa neuronal posible por nuestro escudo. y es que ella no contó con que los humanos somos más que otra cosa _desgraciadamente_ memoria. y cuando menos te lo esperas... te la juega.

una mente inmaculada que brillará por siempre es tan utópico como lo poetizó pope. de ahí que al coincidir los personajes en el vagón conectan al instante siendo por completo dispares. sus miradas se cruzan y se acercan más fluido de lo que cabría. sería este el inicio del amor sobre el que no tenemos control. y viene a su vez confirmando el descontrol sobre el desamor que habían ambos programado. todo fuera de sus manos. lejos de sus planes. nada queda patronado y bien trazado.

y llega así la desesperación de joel. intenta detener lo irreversible cuando cae en cuenta de la enormidad de la pérdida. la ausencia que aproxima a zancadas invita a que se apodere de él el vértigo del pánico. escenas que se esfuman en recortes que vuelan y volatilizan. no quedará de ella nada... y se ahoga... se quiebra el hielo...
es cuando se batalla contra lo imposible ocultando sus tesoros donde nadie de con ellos. esconder lo que escoge preservar de las garras eliminadoras del proceso al que se sometió convencido _o tal vez demasiado herido_ y atesorar lo que desea de su clementine en recovecos cerebrales que considera inaccesibles para otros. tal vez donde le late...

y esa es la lucha contra lo inabarcable de la vida que no concebimos en su absoluto poder por vivirlo en cotidiano. el amor con su desamor es tan grande como no maleable. todo intento de freno o sumar potencia será en vano. y si somos sinceros con ciertos momentos de nuestros días y permitimos escuchar lo que nos susurra la cabeza cuando da por sorpresa con un recuerdo degustaremos la mezcla agridulceamarga de la felicidad con el dolor. si nos detenemos a ver cómo siguen por dentro de nosotros _tras intentos de borrado_ quizá comprobemos que siguen donde quedaron colocados. quizá ordenados por haber respirado calma en aquellos momentos, puede que tapados con paños para no apreciar lo ocultado. destartalados, a medio romper, amontonados o mezclados con otros que no corresponden... pero ahí estarán...

como la clementina para yo_él
y para su corazón congelado con mil lajas

you can erase someone from your mind
getting them of your heart is another story

miércoles, 12 de noviembre de 2008

fe


una vez regalé un juego de palabras sobre lana. todo un éxito.

una mujer dijo _y quedó cual cita_ que es tranquilizador leer un libro de leyes o normas donde ves alguna que nunca te afectará, que no tendrás que obedecer y la cual no deberás acatar.

sé de quien se acaba de quedar sin suelo. así. tal cual.
no muchos le entenderán. y a mí no me ha costado comprender el abismo. pisa sobre la nada, bajo sus pies el hueco infinito que dejó lo que antes le sostenía.
dicen que la fe se tiene con el fin de saciar nuestra seguridad. aporta la tranquilidad que zozobra cuando hay incertidumbre.
y ese era el firme sobre el que vivía de quien os hablo.

desde que convive con la desorientación y el nuevo vacío tiene la atención de su mirada perdida en la incredulidad. me cuenta que el shock le está aislando del impacto mayúsculo que le acaba de asaltar. pero dice más... añade que si el sustento que le acompañaba se esfumó de su vida puede lamentarse eternamente o decidir pisar en otros creeres. y me sorprende.
_la crisálida, también llamada pupa o ninfa _olvidemos lo de capullo_ sufrirá mientras cambia a mariposa?_ me pregunta con ojos muertos de hambre.
y es que sabe de gente que vive sin agarres, sin apoyos, sin paredes, suelos ni techos. seres que suman días sin respaldarse con ninguna fe. son los valientes _para otros inconscientes_ que cultivan su propia huerta, son su materia prima y no necesitan mercado de nadie.

es madrugada de enero. entre el cinco y el seis. y la niña ha descubierto el roscón. cayó el telón.
quién frena la incesante atadura de imágenes que por su cerebro deambulan? cómo secar los océanos que por su garganta comienzan a ascender queriendo hallar salida? y al millón de preguntas aún en pijama, quién les sana la herida?
son las pupilas de la decepción más honda. es no poder cerrar la boca sin decir palabra ni dar respiro. es el nudo más tenso en su pleno centro. es querer correr y no poder. es querer desaparecer bajo las sábanas. y no volver al cole, ni con los amigos. es no querer más chuches, olvidar cómo se canta o salta de golpe. y se supone que eso es la vida... dicen que eso es crecer...

el desgarro ha sido tan eterno que le piden no dejarse ir. que sin creer en algo se puede vivir.
la persona creyente es conversa al ateísmo de los valores que le prometían y de los que bebía.
y se ha hecho bola en su nido arropando bien su nuca. abraza sus miedos para no sentir aún mayor la ausencia de esencia. porque lo sabe. afrontar los temores es mirarse al espejo y hacer visibles los defectos. y su mente está inerte. pero no su valor.

la niña sin reyes alistó durante horas las cosas que podían ser también truco. junto a su almohada se apoyaba su primera ansiedad. y con la ventaja de lo esponjoso que es el tiempo cuando niños, tuvo espacio para temer, frenar, organizarse y creer en otras cosas. que con el sol vendrían los regalos y los primos. y por la tarde el chocolate en taza estrenando juguetes... y su nuevo estado madurado de un sopapo desvelado.

sé de quien creyó. porque quiso. deseó querer. decidió creer. y ahora le han obligado a crecer.

cuando la confianza se rasga cual papel que ya no sirve y ya no hay unión sin fisura...
se destapó la trampa que ya venía tricotada. todo un engaño que está siendo encauzado.
porque no llueve eternamente _y en la mañana del 6 siempre hay paquetes_ y eso ya no es sólo cuestión de fe.

lunes, 10 de noviembre de 2008

18

dadnos al menos 18 recortes del pasado y os daremos 18 respiros a cambio.
era un concurso. algo así...
... y tuve que sumarme _obligada por lo ajeno_ y desnudé mi armario del recuerdo...
porque no me gustan los concursos
y este no iba a ser diferente.
pero lo hice.
participé con la imagen de arriba y dieciocho respuestas:

1. ¿qué vistes por dentro? una arteria de menos
2. ¿dónde escaparías? me quedo donde estoy
3. ¿qué has desayunado? huesitos de santo... _o no tanto_
4. ¿último sms recibido? fría tú? ...estaba descrito
5. ¿alguna puntada no dada? a un disfraz de peter pan reventado por todos lados
6. ¿cómo tienes el corazón? soy más que nunca pin cushion queen
7. ¿cuántos besos se pierden? 800_500
8. ¿y abrazos? los que ahora doy a los árboles del bosque y a quien me quiere
9. ¿qué color del arcoiris? no veo el morado, lo cambio por verde agua en calma
10. ¿con qué compra cediste? aquel edredón de terciopelo era yo... una pena
11. ¿te maquillas? mis uñas quieren laca roja
12. ¿qué botella de alicia no beberías? la que agranda. si soy pequeña, así me quedo
13. ¿y qué botella regalarías? la misma, para crecer en honor, en valor
14. ¿algo de tu bolso? un llavero de olivia con un corazón que me lleva al trabajo
15. ¿último aperitivo en buena compañía? este mediodía
16. ¿qué no entrará en tu casa? una alfombra de piel de oso que he visto hace poco
17. ¿qué suelo pisas? el azaroso amarillo oro
18. ¿por quién respiras? por mí... que los míos respiran solos

fallo del concurso recién horneado:
soy ganadora
a pesar de no haber querido sumarme a la rifa
_el premio os lo detallaré otro día_

¿unas palabras de la que alza el trofeo a la valía de desnudar lo que fue?
...ya no más mandarinas...

jueves, 6 de noviembre de 2008

acertar

una de tres. de momento esa es la opción para cada pregunta. será así por un breve tiempo más. luego cambiarán las normas de la prueba. de ahí que las autoescuelas estén repletas. los futuros conductores huyen de las posibles otras respuestas. buscan una. la única. ninguna más para la duda.

conozco quien se bajó de un coche en marcha. hacía tiempo que sentía que él no lo conducía. le estaban llevando y el viaje dejó de satisfacer sus días kilómetros y kilómetros atrás. un día dijo basta. hace meses saltó a la calzada. se apeó del burro cómodo sólo a ratos. se cansó y lo decidió. carretera y manta.

justo antes del post escucho el resultado de un sorteo. el siete39 de la once. atención: 11_12_13_14_15_22_32 y el 7 para el reintegro.
hoy noche ha sido más ciego que nunca el caprichoso azar.

este lunes pasado hizo autostop mi valiente descarrilado. cansado del nado a contracorriente. harto de escuchar a los suyos, a los otros, a su conciencia. se acercó a la vía conocida e hizo señas al vehículo donde antes tanto recorría. y detuvieron el coche en seco _cómo no_ invitando al viajero a reanudar las curvas y desgaste de ruedas. es un fichaje de valía que les asustó con el puñetazo hecho portazo. no sigo el trayecto, les dijo. tenía el estómago mareado y la brújula de su persona estaba más que perdida. era entre tanto aturdido un brillante pero quiso detener el tiempo. encontrar el perfecto engarce. frenar el cambio de marchas. dar con un mapa _no un plano_ y situarse.

entre la a, la b y la c. del trío una a escoger. los test no son imposibles con las escasas opciones. entre los 39 números del sorteo elegir siete y dar en el clavo resulta más complicado. ni comparar. imaginemos pues la probabilidad de acierto frente a meses vagando sin rumbo marcado. caminar libre sin encadenarse a órdenes ni horarios y sin saber bien tirar hacia dónde. son infinitas las variables. cómo optar por la correcta es lo que entonces desconcierta.

tan bueno como seguir avanzando con la mochila a los hombros es haber decidido detener el motor de uno para sumarse al de los otros. con todo lo recorrido en soledad para diferenciar los caminos y no dejarse llevar sin más. sumarse sin sentir perdida la batalla _porque tampoco lo era_ y reincorporar tu figura para ganar en descanso. el físico ocupado. la cabeza sin escuchas martillo. y sumar.
ganar tiempo, paz, perspectiva desde la colina y dinero.
y sentado de nuevo en el ángulo del que escapaste, querido amigo, tomar las riendas de tus necesidades, tus ofertas y tu sino.

cuando se trata de dar con las respuestas el riesgo varía en función de lo que uno se juega. y la ventaja de que existan infinitas posibles casillas para contestar a la pregunta es que depende de nosotros hacerlas más o menos válidas y llevaderas.

hoy a ti _como hace no tanto a mí_ la vida te coloca donde decías no estarías más. bebes del agua que prometías no probar. y ni tan mal. es lo que hay y toca optimizar. que nuestro camino lo hacemos nosotros a pesar de que sigamos las luces de ciertas circunstancias y creamos que nos dictan por cegar. eres tú quien hace girar el adhesivo vía para marcar tu presente recorrido. y yo aplaudo tus decisiones. el salto para borrar tu vacío y dar con tus huesos. y la vuelta que por momentos te tortura.
que el futuro aún no llega. y ahora vamos a 80 _ya nos tocará ir a más_ y esto también es acertar.
acaso no es más sencillo que dar con la combinación de arriba?

miércoles, 5 de noviembre de 2008

astros

he dedicado la mañana a recados varios. me han tenido que prestar un paraguas porque nos sorprendió a muchos la lluvia gris implacable. la ciudad de punta a punta y mi tarjeta desmagnetizada. me hacía falta una hada madrina. y llegó.

un mosto en copa. como nos gustan a las princesas. copa con hielos para refrescar el trago alzado por el cuello del vidrio estirado. entonces le serviré un mosto grande. pues está bien. que así sea.

esta tarde ponte guapa a rabiar. cómo? más? esta tarde los astros van a conjugarse para darte felicidad. _y yo con dolor de cabeza desde que abrí el ojo de mañana_ pues intentaré arreglar la presencia de mi energía con una ducha sanadora para aliviar el mal que me aqueja y lucir más bella a la fortuna cósmica que me prometes. y dices que será esta tarde...

es usted la reina? me preguntaban unas orquídeas. han venido a mi trabajo en maceta acristalada. reina y punto reina. eso rezaba la tarjeta.

sentadas en la barra disfrutando de un café mi acompañante y de lo encopado mi garganta sedienta. los tulipanes me ha dicho. los que más. la pena que duren tan breve en estado perfecto. horas erguidos. momento de inmortalizarlos. es cuando deberían ser admirados sin más distracción que la de su color. pronto empieza el declive. y al siguiente amanecer sobre el suelo pétalos escapados de la belleza. tres días de tallos sauce de los bulbosos y todo al traste. un desastre.

las reinas tienen su trono. y sentadas en él a veces suspiran por ausencias. la soledad escogida de las que gozan del poder del mango. y eres reina. lo somos. así que nos cuidaremos como necesitemos. hoy le toca a tu reinado. para que brilles. para que sepas que te quieren y además estando ahí bien sentada. que no desciendas. que ese es tu sitio. y si desde mi puesto veo que inclinas ligeramente tu testa corro a rescatarte de la era indigesta. porque te quiero. porque eres toda una reina.

sabes cuidar una planta así? siempre lo hacía mi pareja. él cuidaba mejor de lo verde. era su color. pero explícame cómo mimar la orquídea y le daré todo mi amor. cuando seas capaz de cuidar de una planta estarás preparada. pues por muchos años vivirá.

por lo hablado esta mañana mientras recontábamos monedas. porque no morirán en días. porque están en su casa. de donde no se quieren ir. por ser eternas como la ilusión enquistada. por los colores que coronan tu vestimenta. porque acompañarán tu corona... mi regalo es el campo de tulipanes a modo de alfombra. porque eres reina.

la incógnita llegada en brazos desconocidos. un presente revelado tras la tarjeta acompañante. cosquillas emocionadas por saberte pensada. hay quien además de querer lo subraya. está alerta. se mantiene al tanto de mi postura en el trono. me estudia y me cuida. como haré con la planta. por ser su regalo. por ser amor en ocho flores y más capullos _no acepto más que estos_ recordándome que todo es.
es. sin más. como la lluvia. como el plan de los astros. y punto corona

lunes, 3 de noviembre de 2008

minutito

cuesta reconocer esta boca en la postura adoptada... pero es ella, la jolie retratada por su pitt.
otros dos actores sitos en una cocina. es de mañana y él reparte energía sin reparo. ella se sienta. se mueve él y no calla. quieta ella. ruidos, preguntas, brazos al aire, besos multiplicados y cambios de encuadre. el barullo con él como epicentro. y ella más que aturdida... es de mañana.

me debato más de lo que me gustaría entre decir o callar. entre sacar lo que me invade como inquilino que no paga o regalar silencio y acompañarme a mí misma sin más sustento.
generalmente acabo hablando. suelto lo que siento como si me quemara no verbalizarlo. como si traicionara mi verdad, mi sentir, la esencia que me sostiene. digo por no crear otra imagen a los que me comparten, por darles mi todo, lo que soy incluyendo las palabras pensadas. y para mal de todos suelen ser en ocasiones decires extra. frases que nadie echaría en falta si no las dijera.

la actriz española sostiene una manzana y se desayuna desganada. araña parte de la peladura mientras con uno de sus pies atrapa la silla para evitar lanzarse al vacío. su chico sigue con el amanecer movido. no para. está ella que estalla. él un torbellino. unas tostadas? un colacao fresquito?...

soy la que me muestro. desglosando mis neuronas en ejercicio para desnudar mis adentros. y a veces salpico. no son movimientos de mi verbo de modo descontrolado sin meditación, son todo un expuesto tras rotar mi cabeza en mil direcciones hasta dar con mi sentir definitivo. pero con mis posturas a veces les pellizco.

el despertar de la de la desordenada melena es lento y su compañero de piso y amor busca fiesta. los cortes en el montaje del filme suman ruido al malestar de la aún dormida sentada frente a la mesa.

las necesidades de uno riñen en tiempo con las del enfrentado. sentados codo con codo respiros no acordes.
la de la manzana pude haber sido yo cualquiera de mis muchas mañanas arrastradas con un humor sospechosamente contenido. y he tenido más de un personaje festivo sacudiendo mis legañas...
y el del matinal alborotado pude también haber sido yo _que no en mis mañanas_ en alguno de mis múltiples manantiales del pensar. y también me han sufrido oídos faltos de silencio desde que me dio por hablar.

esta tarde sin ser inmediato a mi parlamentado último he reconocido mis letras de más. mi voz debí callar pero desaté la tripa de mi garganta. perdón. eso he pedido al que mi reciente vez sujetaba la manzana. _quizá debería habérmela lanzado en diana para callar mi boca brecha_
sola, sin nadie conmigo, me he encontrado cerrando mis labios. quizá como le ordenó su esposo a la angelina justo antes de la foto. como ella, yo, irreconocible tras el cambio.

si ya lo decía la pe de coque: con que te calles un minutito...

domingo, 2 de noviembre de 2008

recus

hubo un tiempo en que una nota así no le satisfacía _claro que en este cuaderno no anotan la calificación por grados si no que aprueban y celebran lo ejercitado_ para ella un bien no era digno de su propio aplauso.
recuerda aquellos días con tirones sacudiendo el tiempo. ella no era de las que tenía recus. esos exámenes no le tocaban a ella. bueno, cuando creció más sí... alguno hubo.
lo cierto es que ahora se sienta y me plantea su nueva disyuntiva. presentarse o no. recuperar lo que dejó descosido o incluso roto en trizas o seguir avanzando con la lección aprendida sin enmendar pasados.
la veo teclear el móvil. creo adivinar sus intenciones rectificatorias. a alguien estará pidiendo perdón. dudo equivocarme esta vez. su cara dibuja los nervios previos a la nueva prueba. el rictus antes de la nueva oportunidad de aprobado.
me pregunta qué es lo que haría en su lugar. es fácil calzar sus zapatos. de algún modo todos tenemos meteduras de nuestras patas cuando inmaduras. pero cómo responder acertando. no hay respuesta idónea. creo que en el fondo porque no hay retorno.

la grande, la fuertes, decía que no se rectifica en vidrio, acuarela o amor. en estas materias no hay examen de recuperación. si fallaste te suspenden. no existe el subir nota en estas cosas. un vidrio enfriado no deforma su malformado cuerpo. lo sellado por la acuarela es eterno de ese modo. y en amor...

hemos acordado ambas que lo bonito de las relaciones _del tipo que sean_ es que crecen mientras caminamos. lo perfecto es acordar el paso. no correr demasiado dejando al otro como escoba. aprender según vivimos y hacer del acierto error un crecer de la mano.
su último amor terminó y ahora repasa el ejercicio corregido. _cuántas faltas!_ dice sugiriendo acto seguido que la que hoy vive por dentro no fallaría en eso. _menudas burradas... si es que no sabía nada... cómo pude poner esto!_
con los años sumamos capas de lecciones que evitan reincidamos en los fallos anteriores. cuando la vida nos pone en nuestro sitio es cuando repasamos lo ocurrido y entendemos lo que en su día no.
está apretando los puños de pura rabia. correría en el tiempo para redirigir el pulso de su escritura en el instante de sus desaguisados. mata un trozo de papel sostenido por una de sus manos mientras la otra golpea lo mullido del sillón. impotencia por saber que nada puede hacer. por entender que será siempre así. tropezarse cuando anda, escoger mal el camino, no acertar al actuar. más tarde, pasado tiempo medicina de la vida. y por último, con la lección bien aprendida puñetazos contra el sofá. evitar suceda en repetido. no caer sobre lo mismo. y seguir caminando... con otras piedras en el camino, más errores, suma de tirón de orejas y nunca para atrás, siempre hacia adelante.

hemos convenido también la parte amarga de cualquier relación. se crece juntos. se aprende y nos hacemos grandes y fuertes. pero el peligro existe en esos quiebros. en los errores está el defecto. ofertamos al otro nuestro ser inmaduro y con un catálogo de inseguridades y temas por entender, asumir, y aprobar. sin quemar etapas es poca ofrenda sabia la que presenta nuestra vida. _y conviví con ese amor mayúsculo cuando era una analfabeta. no pude darle lo que hoy sé. cometí errores que si los pienso me destrozan_ su repaso le sabe a un aprobado justo, a un bien a lo sumo. y ella busca el máximo. _a él le quise hasta el infinito y la que fui no pudo darle más de lo que entonces era_ habla su voz enrabietada pero no puedo más que escuchar.

es tal la situación. con nueve años haces un examen y a los quince cae en tus manos aquella prueba. te ríes. qué tiernos los errores de entonces. con veinte a tus espaldas te sometes a otro test y cuando cumplidos siete más revisas lo respondido cargas con lo aprendido. y caminas. no paras. hoy con más canas repasas los fallos del examen de hace unos pocos años y todo te sangra. comprendes, anotas, estudias, resumes, memorizas. caes en cuenta y haces que te cale dentro. y qué hacer entonces con la herida que brota?
no hay retorno. no estás en el colegio. terminaron los días de recus. esto es más serio.
las segundas oportunidades ahora se ejercitan en otras aulas. lo que suspendiste en una escuela lo enmiendas _si quieres_ en otra. pero los que entonces te dieron el cero hoy no son los que te aprueban. son otros.
las recus de ahora son de cara a nuevas vidas. en otros caminos. distintos cuadernos. nuevas historias. y lo que erramos en los años que apuñalan con arrepentimientos y ganas de acelerar la marcha atrás no se desdice. lo pasado pasado queda. que ahora tus pasos saben de aquellas faltas y esquivan lo que taladra en tu memoria.

lo que ahora confieso no se lo digo a ella... en mi fondo profundo y oscuro guardo noches nadando en salado. también yo almaceno archivados exámenes con menos del cinco. y vaya si duelen... pero no se lo digo. no a ella que clama azotada por zurcir jirones de antaño. me pesan a veces las piedras encontradas en mis recorridos pasados pero a ella le digo _y repito_ que el truco está en fijarnos si vemos alguna parecida a ellas para saltarlas. y prestar mucha atención _sobre todo_ a las preguntas trampa que hasta hoy nunca han caído en los exámenes.
leer bien el enunciado porque ya no existen las recus...

sábado, 1 de noviembre de 2008

rubí

soy de algún modo estrenada vecina de un fotógrafo. le asalté hace unas semanas y fue invitado _bienvenido seas_ a participar entre nosotros. quizá ha sido esto lo que ha hecho que acumule ahora imágenes de todo mi entorno. pero no. no ha sido él con su cámara. creo que no. la foto que arriba adjunto ha sido disparada por una tal grunstein con habilidad enorme para colarse en la habitación de mi amiga y retratar semejante instante.

ayer mi espalda y hoy el pensar de una reina. fotos de nuestras intimidades. y sin siquiera oler que nos enfocaba la lente desconocida. cómo habrán llegado a mi las tomas...

cuando los nudos cerebrales se empeñan en descontrentrar nuestro quehacer diario, cuando aplastamos una y otra vez la misma colilla. cuando nos dañamos, al hacer de la obsesión nuestro movimiento paralizante no avanzamos.
el laberinto destructor de nuestro ser nos apodera. permitimos entrar a látigos ajenos a nuestra cabeza y nos sacuden. demasiados desvíos para uno. es hacerse daño sin encontrar el freno. es malgastar vida rehaciendo una y mil veces el atado.
piensa en verde decía la cerveza. colócate en un prado largo o en una calle plena por barrer, aconsejaban a un amigo.
un rubí. tengo una amiga que piensa en un rubí. los brillos que encienden lo oscuro. contra los golpes lo duro en piedra. para sus torturas preciosidades. cada arista recorrida por su gris materia escapando de la negrura. el destello del rojo fuego. la vida en un beso carmín. los sueños concentrados en la semitransparencia. su corazón latiendo tan grana como la tallada.
hace tiempo sostenía la pieza muy de seguido en su imaginario. ahora no le hace falta. la felicidad le desborda de manera contagiosa. luce una sonrisa que no se logra tras la vitrina del joyero. ese es su preciado valor.
es en contadas ocasiones cuando se desplaza a su lecho real y abraza su aristada.
preciosos sueños. preciosa ella. mi amiga.
para ella este rubí. una joya para su corona.