martes, 8 de enero de 2008

luces




hay una escritora que se sienta frente a sus historias en creación el tiempo que dura en apagarse la vela que prende a diario. cuando se agota la llama deja su labor. puede sonar extraño; abandona las palabras dejando quizás un momento por desenredar o un diálogo recién comenzado.


en marzo conocí a quien se hizo pronto un gran amigo. nos citábamos una vez por semana. y al igual que la escritora él encendía una vela. de 15´00 a 16´00... generalmente de 11´00 a 12´00 y luego la apagábamos conscientes de haber dejado un tema por profundizar o puede que unas lágrimas por convertir en risas. pero a mí me sobraba. si acudía a mi cita con entusiasmo salía de allí con mayor energía. llorando muchas veces pero cargada de fuerza. riendo otras con piezas de mi puzzle encajadas y en su lugar.


si dedicáramos a cada actividad el tiempo que requiriese ocuparíamos a veces las 24 horas del dia en ello con las 24 siguientes a sumar. dar el corte es dificil. apagar una vela implica acabar una cena, despedir al apagón, recibir la mañana... terminar algo. pero ¿y cuando obligamos a que acabe en momento inoportuno? como con la corriente de aire tras el portazo se extingue la llama aún necesitándola. queda la estela del humo unos instantes y el ojo se hace de nuevo a la oscuridad con lo aprendido en la luz para evitar la ceguera absoluta.


mi amigo apagaba su vela con un abrazo largo para mí y mil caricias para mi pompa. y yo bajaba las escaleras dejando el rastro del humo de nuestra charla y con los párpados bien abiertos para no tropezar en la oscuridad de mis ojos en agua. con el recuerdo de la luz de una hora lo complicado, lo torcido o feo, lo que se nos escapa empezaba a ordenarse.


por si la vela se agota ten más de una guardada. por si tu tiempo apaga la llama lleva cerillas en tu alma.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena por tu blog. Manomadeporapair fue bonito, pero estoy contenta de ver que Larraitz con Pompa promete dar muchos frutos también. Ánimo en tu nueva vida. Me estoy acordando de los versos de un poema muy, muy, muy especial para mí:

"Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.

La vida es bella, tú verás
como a pesar de los pesares
tendrás amor, tendrás amigos.

Por lo demás no hay elección
y este mundo tal como es
será todo tu patrimonio"

larraitz con pompa dijo...

vaya... ahora soy yo la emocionada.
gracias por dar en la diana de mi hoy rojo rojo corazón
un fuerte abrazo
bienvenida