sábado, 7 de noviembre de 2009

valor

lo digo siempre. es lo que llevo presente en la frente. las cosas tienen el valor que se les dé. así es.

una medianera en jamillan_punto_com me retuvo como la luz amarilla en posición de la roja de la imagen nos haría detenernos. precaución. al volante y en cada paso. ponga ojo el peatón y el conductor.

aquel edificio guardaba un secreto que no a todos mostraba. por un costado se percibía. quien alcanzara la posición justa. a los ojos de quien observara y buscara más que la primera impresión. más que la fachada.

cuando se dice que una amistad es un tesoro empiezan a girar la varilla del algodón de azúcar rosa y se pringa todo de un cursi dulzor. pero tan pegajoso como cierto. cuando se da con alguien que ocupa parte de tu interior es como una saca de monedas y joyas con piedras amontonadas en un cofre a la espera de ser descubierta.

soy de las que busco y remiro. de las que alcanzo a ver donde las pupilas no aciertan. olisqueo pistas y mi olfato destapa lo oculto. y así me hago con acuñadas piezas que nunca hallaría de no insistir en el inconformismo de quedarse con lo que nos muestran.
aquella fachada no era ciega. aquel perfil me habló y descubrí el corazón. privado, coqueto, sensible. hogareño. con plantas. apacible. sin perfecciones. con taras. como todos. y me convenció.

cuando el amigo se va o lo marchan es cuando hacen algo más que atracarnos. lo que nos quitan de dentro es mucho más que el baúl con el oro más reluciente, mucho más que el desenterrado botín de la palmera y el aspa con pasos en el mapa. si la amistad deja de estar resplandeciendo en nuestro adentro es cuando lo entendemos. la ausencia encañona al dolor de lo que hubo. y queda el agujero perforando sin piedad.

para ser el pequeño más valido hace falta ser valiente. convencerse de quien eres. comprar macetas y rodearte de flores. limpiar tus ventanales y encalar los marcos de los vanos. alumbrar la entrada con la bombilla más cálida. remarcar y enmarcarte con tus límites convencidos. no avergonzarte. y disfrutar de lo que eres. y así, una vez hecho esto, hacerte accesible con las escaleras que te conecten a quien quieras que suba hasta tu puerta. y cuando llamen, si te merecen, les digas que para ellos la dejaste abierta.
para ser el david del goliat más fiero lo primero es saberse bello. mirarse dentro sin miedo. ver las fisuras, los desconchones, lo oxidado y lo viciado de años. estudiar cada esquinita con detenimiento. todo al detalle. las estrecheces, los techos bajos, los escondites, el rincón sombrío y la tarima que suena. y con todo lo destartalado ensalzar lo bueno y compensarlo. lo doméstico ganando al artificio. lo natural a la impostura. cuestión de posiciones y asunción. más amor y menos caprichos de infantil adulto. la yema sin la cáscara. sin ni siquiera clara. la castaña sin caparazón y mucho menos púas.

dicen que la parcela vallada quiso tras años ser ocupada. el de las tres chimeneas quería más y encargó ampliar su edificio prolongándose a un lado.
se dice que llegó a haber planos. trazaron dónde iría lo nuevo. otro salón, más dormitorios, un baño grande, la biblioteca y una estancia de juegos. cuentan que si era innecesario, que si era fruto del derroche. que el rico siempre quiere más por no saberse satisfecho ni torcido ni derecho.
y la escala con su paseo de colorados tiestos no dijo nada. calló la puerta y no habló la ventana. dicen que el azul siguió en su calma y que en aquella casita del centro no se escuchó ni a un alma. nadie respiró en contra de la reforma que amenazaba.
de nuevo lo impuesto en balanza con lo más sincero. lo nadado en corriente frente a el cruzar de lado a lado.

cuando he vivido el arranque de lo querido he saboreado la hiel más densa.

cuentan que cuando la bulldozer activó su arranque temblaron todas las hojas. se cuenta que al desplegar el ejército de obreros estremecieron los tableros. pero nadie habló. el chico no pudo decir nada. enmudeció el temor de decir quién era ante la fuerza de lo dado por hecho.
lo que ocurrió entre el comienzo del derrumbe para levantar la invasión del que amasa y el grito del corazón valiente varía entre las mil voces. pero lo que se sabe _a buen seguro_ es que cuando quisieron acercarse a los peldaños lo que habitaba dentro dijo que no.
sin saber de dónde sacó la vida convencida que le latía y no conocía por no escucharla.
se puso en jarras. escudó su escalera, sus vidrios, la luz de acceso y su jardín dosificado y no cedió.
cuentan que la máquina dejó su rugido y los planos se mojaron. se dice que la mirada de aquel azul verde agua fue tan clara que no hubo lugar para más estancias, ni mármoles ni sala de billar.
lo real tan convencido por fin habló y abanderó lo que era en su privado. oculto hasta entonces dentro del grande. agazapado tras la fachada más conocida y reservándose a quien se asomara con ganas de querer ver. lo que era, aquella casita chica y en frasco pequeño, asumió quién realmente llevaba dentro y se dio su justo precio. ni más ni menos. y con ello ganó.

a quien entra dentro se le llama amigo. quien sale y deja cuevas es que lo fue y quizá ya no lo es. nunca se sabe.
quién deja que llegue la maquinaria y eche su tesoro por tierra es que no se merece. porque la dentada pala del destructor que aterra a todos es por lo que hace falta muchos arrestos para parar su mordisco.
quien sabe el tesoro que supone no se deja comer. quien percibe todo el brillo de sus monedas se opone al glotón despiadado. ese, el que se valora, es el que finalmente vence al goliat y gana y se queda con su puerta, su azul, su paz, el riego diario, y cada huella y contrahuella de la escala.

para quedarse, amigo, hace falta.
para quedarse sin el amigo y seguir, también, hace falta.
valor y al toro.
dolor.
contra el horror. valor!

6 comentarios:

Pepa dijo...

Cuanto disfruto con lo que escribes. sí, verdaderamente la seguridad en uno mismo es una gran cualidad y un aliado para sobrevivir. gracias por tu gran ayuda en la busqueda de Ibai. hoy he llamado a la perrera y lo han capturado en la calle Bertendona, dormido , me dicen que es agresivo ¿ no sera el miedo? pobrecillo, vamos a intentar que nos lo den. tenemos una buena mujer que nos lo tendria en su casa hasta encontrarle el hogar definitivo. besos, quertida niña

larraitz con pompa dijo...

pepa_querída,
cuánto me alegro que Ibai no corra más peligro. agresivo?? quizá le estén tratando hombres, con nosotras estaba alerta pero inofensivo, pero al aparecer el chico... su temor se hizo mayúsculo. pobre. qué buena noticia. espero, también, que os lo cedan y duerma en un hogar donde le cuiden y mimen como necesita. qué valientes son!
gracias por volver a beber de las pompas de leche. es un orgullo saber que nos sigues el nado. y que te llenan.
seguridad en sí misma, pepa, eso es. y tu pelo largo!
besos

Anónimo dijo...

Me encanta que mires mas allá con tus ojos y tu mente, y que lo que ves lo compartas con todos en estos textos increíbles. Preciosos. Gracias por hacernos pensar y entrar en las c@sas.

besos del que te socorre rápidamente cuando un perro te ataca en mitad de la noche.

niño chino dijo...

perros atacando a larraizt ??? raro raro raro

larraitz con pompa dijo...

anónimo_ vaya...
gracias por tan bonitas palabras. me llena acercarme tanto a alguien con mi modo de ver las cosas. me hace sentirme más acompañada. es bonito.
claro que, para bonito tú. que me acompañaste tan bien desde tu camita calentita cuando una perra se enganchó en mi nariz mientras jugábamos. el querer que te tengo te arropó bien sabiendo que no acudirías... dormilón amigo del alma!

larraitz con pompa dijo...

niño chino_ diste en el clavo. no me atacó un perro. la perrita en cuestión jugaba conmigo y metí mi cara donde no debía. acostumbrada al morro de pompa aquello resultó una leona! pero seguimos siendo amigas. no fue nada. si me vieras ni notarías la marca...