domingo, 22 de noviembre de 2009

móviles

en today_and_tomorrow di con esto. ironizo conmigo sobre la ubicación de la imagen. parece mentira que lo que me chilla la foto venga en un nombre tan opuesto de site. claro que las circunstancias son las que determinan al hombre. eso somos además de pellejo, carne y huesos. y ahí entra mi subjetivo desglosado de lo que aparece retratado. un número escapando por un lavabo. alguien le empuja a hacerlo. hay que decirlo.

cuando la luna que hoy nos acuna aún no había comenzado a decrecer salpicaron decenas de mensajes a la que me confesó su desconcierto. tras meses de afonía de un cobarde descorazonado su voz taladró la noche de la que tan sólo quería dormir.
ella _como yo_ es de las que elimina contactos del móvil sin reparo en cuanto entiende que no serán más marcados. lo hace y no le duele. porque para cuando confirma su eliminado ya ha sufrido y el aceptar al borrar no es más que un punto y _necesario_ final.

hace año y medio perdí mi móvil en plenas fiestas. creo que con la traca de los fuegos decidió darse un baño en la ría la kitty japonesa que custodiaba mi celular. y con su baño hundió mis atesorados mensajes, las fotos de mi preciosa _la más_ pompa, y el listado de contactos.
lo único que aprendí con causa efecto fue que quien no debía estar en mi agenda no volvería. y eso no iba a dolerme. era una limpia obligada. y comprendí que vendría bien para desempolvar uniones ya no existentes y aplaudir las que nunca dejaron de serlo. lo de los mensajes y las fotos sigo asomándolo al filo, arriesgando su extravío, sin hacer esfuerzo mínimo por duplicarlos o colocarlos a buen recaudo. no aprendí ni con aquel suicidio de la gatita que me hizo llorar. y no hago bien.

la asaltada en plena noche _antes de la cena y hasta bien tapada la madrugada_ no pudo cerrar el buzón de entrada al derroche acosador del que en su día quíso ser fantasma. algunos de los escritos no pudo dejar sin respuesta por pura y dura provocación. ni el cansancio de la semana ni el que su visitante le produjo tiempo atrás sostuvieron sus palabras de vuelta. duras, cargadas de tanto reparo como de diginidad alerta, asépticas, y sin espera. no más.

los números de quien forma parte de mi esqueleto y motor los mantuve durante largo tiempo sin registro. luego he visto que lo hace más gente. prefería marcar cada dígito y retenerlos en mi materia gris a salvo. no buscaba más que trabajar por poder contactarlos si no gozara del chivato.

de vez en cuando lo hacía. me contó entre aturdida y perpleja. de cuando en cuando _le venía en gana_ llamaba a la aldaba de su número y cargaba la entrada con una suma infinita de mensajes. sin espacio para digerir lo dicho. en una generosidad excesiva de sentires, pensares, confesiones, exigencias, reproches, susurros, coces, deseos, roces. en un regalar lo que le incordiaba sin preguntar si quería ella o no algo o nada.
tras la estela de su detallada explicación de este inesperado esbozó algún otro que tras pérdidas en el fondo del agua más helada sufrió el antojo de subir a la orilla a tomar contacto y robarle algo de aire a mi amiga. igual que se iban retornaban cuando nadie _ni ellos_ apostaba por ello.

recordamos a la gente con intermitencias variables. los cotidianos entran en nuestro cupo de llegada del mismo modo que rellenamos de ellos la de enviados. pero los hay que salpican por sorpresa. son los que no nos hacen abrir los ojos, los que atraviesan nuestro rostro con una boca sonriente o en lo abierto de la perplejidad absoluta.
quien nunca se fue porque no estuvo de seguido y llega en sms me regala una bengala en lo oscuro. es un bombón con relleno de avellana entera. son terciopelo en el hormigón diario.
pero quien cogió la puerta y la hizo girar del portazo, quien te dejó con la palabra en el horno, quien no contestó o quien lo hizo de malos modos, ese, si aparece en tu pantalla del móvil _que en mi caso lo hace sin nombre y es una ristra de números a secas_ molesta e inquieta. retuerce el día aunque ignoremos lo que nos vocea su desvergonzada osadía.

cuando la encontré bufando humo frente al espejo estaba en el baño. miró a través del reflejo hacia mi bolso y me pidió algo con lo que escribir mientras remangó su brazo.
le tendí mi rotulador negro y comenzó a narrar la noche en que empuñó el abrecartas. mira que puse empeño _y escribió el siete y el tres tras el cero_ pero me agota. no puedo más _y continuó con los dígitos_ esto lo acabo ahora mismo, verás.
me tendió su teléfono y me pidió borrar el contacto que seleccionó en la pantalla. debía hacerlo al tiempo que limpiara de lo escrito su piel. me va a costar darle yo al ok_borrar_de una vez _dijo abriendo el grifo_ así que hazlo tú por mi con este número.

a todos ocurre. es lo que veo. quien más quien menos tiene puertas que condena y encuentra un día de nuevo abiertas sin explicarse cómo y mucho menos por qué.
una sola cosa es definitiva y es la que nos para la vida. el resto son idas y venidas. cierres con llave al mar que a veces se empeñan en regresar. el delete o supr que accionamos cuando nos hartamos en ocasiones reaparece y centellea como por obra y magia de lo que ignoramos de la informática o la tecnología punta. lo echaste de tu vida. eso creías. le diste el adiós. se lo tiraste. pero no.
por mucho que ahoguemos no deseados contactos por el sumidero de un baño de madrugada no hacemos más que moverlos. desplazarlos.
si no mueren no los matamos. no está en nuestras manos como confiamos. no son tan obedientes. y como se fueron o los espantamos vuelven. suben y bajan. aparecen y se borran. se mueven. porque están. en algún lado siguen. cosas de móviles...

6 comentarios:

gato malo dijo...

la verdad es que a veces esta bien purgar la agenda. limpiar (no borrar) de forma consciente los recuerdos-rémoras ayuda a que en nuestra vida diaria, un paso de la A a la Z sea un paseo feliz, y no un mini-viaje de sobresaltos.

sigue con tus pompas!!!!!

besos

larraitz con pompa dijo...

gato malo_ hace dos días pensé en ti. porque _mucho me temo_ creo que sí sé quien eres...
y a ti no te borré de mi agenda. eres de los que me hacen sonreir.
gracias por volver! te echamos en falta. no desaparezcas tanto tiempo...
bss

gato malo dijo...

no temas nada!!!!

espero que te vaya todo muy bien, tengo muchas ganas de verte (espero que aciertes con tu puntería), y también espero que no me temas, no araño. la próxima vez que suba te llamo.

sigo leyendo tus pompas, me encantan.

besos

pd: hay una frase que sólo tu y yo conocemos que puede delatarme, iluminame!

larraitz con pompa dijo...

gato malo_ y si te digo gudane, vale???

gato malo dijo...

has escarbado... bien profundo! :(
pensaba que recordarías otra referencia más... infernal! ;)
besos, bye

larraitz con pompa dijo...

gato malo_ la recordaba, de hecho cuando en tus paseos primeros aposté por ti fue porque entendí el porqué de tu nombre. si yo era can...

gracias, gato malo
gracias por tanto

hazme un magno favor: sigue gateando por entre las pompas. no dejes de visitarnos ni de comentar. qué bueno tenerte en nuestro nado. amigo gato _no tan_ malo