viernes, 5 de noviembre de 2010

brotes

eran más. muchas. muchísimas más de las que cabría esperar poco tiempo atrás.
siempre que lucía su brillo al andar comenzaban a encenderse las bombillas.
más. muchas más de las que alcanzaba a abarcar. eran tantas que no podía atenderlas.
sentía que las perdía. más ideas que días. eso tenía.

la sístole del niño que aprieta los puños y labios. contiene el grito que sustituye a las palabras que aún no acierta a colocar en su arranque. el plan atraviesa su frente y sus piernas trotan.
la sístole de la que navega y a ratos bucea. el aliento sostenido entre resignados suspiros. tanto pez ve que hace su particular banco con cada barco lanzado a nado. y para_qué preguntan sus dedos mientras reservan lo que la red capturó para ella. pupilas cubiertas que corren a rincones donde dibujan y construyen mientras los sueños planean. donde ella crea.

guardó para el por_si_algún_día. recortó con la afilada cuchilla los que si tuviera otra vida serían de su autoría. archivó guaridas. protegió de la quema letras y pétalos a punto de hacer cenizas. compró con la apuesta. encontró. esbozó en un cajón posibilidades que en parte ya daba por muertas.
y en la pared de aquella sala el colgador se cargaba. en on_montague aparece el perchero con sus diez garfios entre generosos y anzuelos.

en diástole escucha a su abuelo el niño. que eso no se toca_que te queda grande. en el reposo los oídos se abren y percibe la locura del instante anterior. el cauce riega su prisión y deja a un lado el caballo. silencia los tiros y todo vuelve a su sitio.
en diástole dilata sus ansias y detiene la lista. no acumula cuando se llena las manos de calma. relajada es cuando analiza y se suaviza. bonito que pesca, bello que lo deja. sin retorcer ni un segundo ni la malla ni la pita.

lo de una taza para cada no le bastaba. gozaba de todo cuanto rotaba y de la variedad degustada. los siete pares para cada día no le valía. tampoco en los trapos. nada contado. sumaba según se prendía.
así guardó, recortó, archivó y dio guarida. encontró, esbozó y vistió el colgador.

el motor trabaja por el sube y el baja. se achica para el empuje y se ensancha para la recepción. dos movimientos que encadenados dominan el ritmo de la vida en negro y blanco de dominó. los ejercicios se complementan alejando cualquier intento de dictadura. ni se genera de continuo ni se está siempre a la espera. no todo es trabajo. no todo es siesta.
las arterias ordenan al corazón a seguir sin perder paciencia. sístole para las ganas. diástole para las horas. es el bálsamo justo a punto del reventón. es la bocanada para el viciado enganche.

acababa de sentir otro. era de los delicados. especial y frágil. tanto que no supo bien cómo conservarlo sin que le rozara algo y perdiera el halo.
se detuvo. su pechó se encogió. de nuevo ese peso.
tomo el aire que pudo y colgó el nuevo brote. para más tarde. para otra vida. no halló la ocasión.
latió el corazón.

2 comentarios:

Sendoa dijo...

el por_si_algún_día recortes de revistas tuyas y mías para hace nosequé en nose donde.

Nosequé nose donde sé que es y que es más que cosas que veo delante y puedo tocar más fuerte que paredes, suelos y techos que me acaban oprimiendo. Los nosequés me llevan, me hacen mover. Archivamos petalos,letras, fotos de otros.
Respuestas para un dñia que se yo que un día tendrán respuesta, sentido, tendrán un sitio, un donde, un yo si sé. Como tu y yo, andandodeladoalado para encontrarnos. Ahora.

larraitz con pompa dijo...

sendoa_ ese nosabesqué que también me tiene a mí con a tientas nos ha traído hasta aquí. todos los nosabemos cómos ni cuándos ni por qués estarán por algo. y yo ya tengo confianza ciega en todos ellos.