viernes, 17 de diciembre de 2010

alados

desde las cumbres blancas una sonrisa ha bajado volada por la brisa más fresca. la mañana ha comenzado limpia y dibujando al aire esa contenta mueca. veo la espalda alada de quien persigue sueños y no ceja en el empeño de ser su propio dueño. la cordillera cubierta se hace de posibilidades bandeja y nos las sirve quien pasea por ella.

cuando huimos de la vista del día a día buscamos más que dar de comer a los ojos. cuando nos vamos lejos, alto o a lo más perdido estamos persiguiendo las sirenas que nos llaman desde el silencio concebido en sonido sólo para nosotros.

la lucha por alcanzar metas algunos la leen como sueños incumplidos al otro lado del recorrido. al yo más aferrado le retamos. a ver si subes más allá de las faldas. a ver si surcas más costas. veamos cómo cavas de hondo o lo rápido que levantas refugio. y en un casino hecho para un sólo jugador lanzas la apuesta. serás capaz de aguantar y resistir lo que te eches. perderás el miedo que empachó tus otros días. darás con lo que era tesoro escondido. aprenderás y pasarás a ser maestro.
y con la superación como único espectador comienzas la gesta.
bracear una olímpica como cuchillo con mantequilla sobre la rebanada de los cincuenta puede ser un reto si mejorar la resistencia física es tu medalla dorada. y te mojas.
alejarte de la cota cero llegando al poco oxigenado cielo y tocar tu techo es tal vez el sueño que alcanzas a base de abrigo amigo y todo el equipo. y lo clavas.
tejer la manta que cubra dos camas puede que sea tu reto para alcanzar la constancia de una penélope que no deshará por seguir siempre en avance. y pones tu punto.

desde la tierra, entre rocas, la sonrisa bien nacida buscaba una respuesta cuando ha dado con la foto de milena_silvano y ha sabido que era la perfecta. veo la espalda alada de quien persigue sueños y no ceja en el empeño de ser su propia dueña. los peñascos bañados en balsa se hacen de superaciones bandeja y yo que paseo por ellos os los acerco.

parte de lo pétreo que vemos se hace abiertos. entre lo duro que nos presentan existen huecos. y a ellos va meditando la que recibió al tigre con los cambios que trajo. hacia ellos se dirige la que no teme al agua oscura sobre la que ha de poner _que se lo dijeron ayer_ más fe que vista.
a miles de metros de altura se respira la dicha de haber vencido tanto que un grupo de negros peñascos mojados por la mar en calma quedan tal vez diminutos. pero desde lo alto, en alguno de los resquicios que se cuelan por un fisurado blanco podría verse _con la vista de quien lo quiera_ ese otro pedazo de tierra hecho meta. para otra guerrera. para la que batalla por sus sueños en otra clase de vuelo. pero bajo el mismo cielo.

2 comentarios:

Julia dijo...

Mi querida amiga.
¿Qué es más importante llegar a ganar la batalla, alcanzar la meta o la lucha, el empeño que se pone para conseguirlo?.
Sabes, te hago la pregunta no como un reto si no planteando una duda, tal vez mi duda o la duda de tantos y tantos que luchamos para sabernos, para sentirnos vivos.
Un beso muy fuerte y gracias por cuidar con tus visitas de mi sitio.
Julia.

larraitz con pompa dijo...

queridísima julia_ anteayer volví a leerte... te cuento: repasaba mi entrada de los 16 de diciembre anteriores y en uno de ellos leí un comentario tuyo. volví a recordarte, con cierta nostalgia/preocupación porque te he visitado mucho pero dejé de escribirte por temer ser pesada al recibir tu silencio como respuesta.
estoy sonriendo por tu regreso. no sabes cuánto! y sin duda _y para responder tu pregunta_ te diré que de sobra sabes que lo bueno es el camino, el empeño y la lucha por seguir los sueños. me temo que tus no "cartas" se han debido a que has estado enfrascada en esa batalla, que espero sientas como otro éxito a sumar, sea cual sea el final.
has vuelto _por navidad..._ y no sabes lo que saltan las pompas. gracias por regresar y, como siempre, por tu cariño al comentar